Jerusalén. - Un atacante suicida del grupo islámico Hamas detonó anoche sus explosivos en un club nocturno provocando por lo menos 16 muertos y 50 heridos. El ataque ocurrió en la localidad de Rishon Letzion, al sur de Tel Aviv, paralelamente al comienzo de las conversaciones en Washington entre el primer ministro israelí, Ariel Sharon, y el presidente estadounidense George W. Bush. Poco después de finalizada la reunión, Sharon anunció que regresaba a Israel.
El ataque se produjo a las 23 (hora local) en el "Spillclub", un salón situado en la tercera planta de un edificio de cuatro pisos. La policía explicó que un hombre con una maleta corrió al medio de la sala, situada en el tercer piso del edificio, y detonó una bomba. Según esta fuente, no había guardias en las puertas del centro, tal como es habitual en casi todos los edificios públicos en Israel. La localidad de Rishon Letzion se encuentra en la orilla del Mediterráneo.
Hamas: habrá más ataques
El ataque fue revindicado por el brazo armado del Movimiento de la Resistencia Islámica, Hamas, en una llamada telefónica a la agencia francesa AFP. "Reivindicamos el ataque al club Spiel de Rishon Letzion", expresó el informante, al señalar que hablaba en nombre de las Brigadas Ezzedin al Qassam, el ala armada del Hamas. "Vamos a lanzar nuevos ataques esta semana y declarar la guerra santa contra todos los israelíes, en respuesta a lo que el ejército israelí cometió el mes pasado en el campo de refugiados de Jenín", en Cisjordania, agregó. Por su parte, la Autoridad Nacional Palestina condenó enfáticamente el ataque suicida.
Fuentes policiales dijeron que la explosión, que se produjo en una sala de billares, provocó el desplome del techo del edificio. "Era un kamikaze que llevaba una gran carga explosiva", declaró a la televisión el adjunto del comandante de la policía para la región centro, Yifrah Sojovnik. "Todo indica que el suicida se inmoló en el medio del club", comentó Sojovnik a la televisión estatal. Los socorristas estimaban anoche que el número de víctimas podría incrementarse debido a que una cantidad indeterminada de parroquianos estaba atrapada bajo los escombros.
La explosión causó grandes daños en el edificio y el alcalde de la ciudad, Meir Nitzán comentó que los bomberos procuraban de apuntalar el edificio por temor a que se desplomara. "El atacante vino repentinamente al club y se voló", comentó otro comandante policial, Haim Cohen. Las emisoras israelíes de televisión confirmaron que el artefacto explosivo estaba en una valija que portaba el atacante.
La explosión atrapó a numerosas personas entre los escombros al provocar el derrumbe del techo del club, dijeron testigos. "El piso completo voló por los aires. Parecía como una terrible pesadilla", comentó el testigo Hanir Azulei.
Se trata del primer ataque de un suicida desde el perpetrado el pasado 12 de abril por una activista palestina que se inmoló en un supermercado de Jerusalén matando a seis civiles, al día siguiente del comienzo de la invasión militar israelí a las ciudades palestinas de Cisjordania denominada Operación Muro de Defensa.
Previo al atentado, el jefe de las fuerzas armadas, general Shaúl Mofaz, informó en el Parlamento (Kneset) que las tropas de Israel regresarían a las ciudades palestinas si volviesen a registrarse este tipo de atentados. Los integristas islámicos estuvieron entre los más enérgicos críticos del presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Yasser Arafat, por aceptar el destierro de trece de los 123 palestinos cercados por los tanques israelíes en la basílica de la Natividad de Belén.
Un funcionario de la oficina de Sharon, David Baker, señaló que "está claro que la Autoridad Nacional Palestina (ANP) no se rindió en sus acciones terroristas ni en su senda criminal".
Sharon acortó su visita EEUU
En Washington el atentado también repercutió. El premier israelí Ariel Sharon anunció, tras reunirse con el presidente de Estados Unidos, George W. Bush, que regresaba a su país. Sharon tenía previsto reunirse con congresistas estadounidenses y hoy iba a viajar a Nueva York para entrevistarse con miembros de la comunidad judía.
Tras su reunión con Sharon en la Casa Blanca, Bush había anunciado que enviará de nuevo a Medio Oriente al responsable de la Agencia Central de Inteligencia estadounidense (CIA), George Tenet, para participar en conversaciones sobre política de seguridad. Bush señaló que Tenet deberá lograr que se unifiquen las fuerzas de seguridad palestinas bajo un comando único. Estas fuerzas deben luchar contra el terrorismo y buscar la estabilidad, subrayó el mandatario.
Bush y Sharon comparecieron ante los medios de comunicación al final de su encuentro, de una hora, pero no se pronunciaron sobre el más reciente atentado suicida perpetrado en Israel. Poco después Sharon decidió interrumpir su viaje.
Bush se refirió a las fuerzas de seguridad unificadas bajo un comando único como parte de marco necesario "para un Estado palestino potencial". A ese marco pertenecen también medidas en materia de formación y de desarrollo económico. Sharon afirmó, respecto a un futuro Estado palestino: "Todavía es prematuro contemplar esa cuestión. Debemos concentrar todos los esfuerzos en lograr que tenga lugar una verdadera reforma en los territorios palestinos".
"Israel quiere la paz y ahora, después de la operación más reciente contra la estructura del terrorismo -en referencia a la campaña militar de un mes que arrasó con la ANP y dejó cientos de palestinos muertos-, hay una posibilidad de avanzar", consideró el premier israelí.
Sharon remarcó que él y Bush hicieron "énfasis en la necesidad de que haya reformas en la Autoridad Palestina" y agregó que discutieron "también el tema de una conferencia de paz regional". (AFP, Reuters, DPA y Télam)