El ansiado viaje de estudios de al menos un centenar de adolescentes rosarinos y de otros tantos de localidades aledañas corre serio riesgo de cancelarse. La empresa Daminato Estudiantil estaría atravesando graves dificultades financieras y los rumores sobre su posible salida del mercado corrieron ayer como reguero de pólvora. No obstante, uno de sus responsables le aseguró a un desesperado grupo de padres que "los chicos van a viajar" y adjudicó las versiones "a la competencia". Lo cierto es que ayer en su sede local la mayoría de las oficinas estaban vacías y su página web, inaccesible.
Hasta el momento, la firma no cumplió con los requisitos que exige la Secretaría de Turismo de la Nación para poder operar con contingentes estudiantiles durante esta temporada invernal.
La Capital intentó dialogar ayer con los responsables de la empresa pero no fue posible. En tanto, desde Daminato Viajes y Cambio se aclaró que esa firma "no tiene nada que ver" con Daminato Estudiantil.
"Compartimos el apellido, pero no tenemos ninguna relación. Se trata de dos empresas diferentes, con domicilios diferentes y legajos distintos", aclaró Guillermo Daminato, uno de los responsables de la empresa dedicada a viajes en general y al cambio de divisas.
Pero si bien no hay ninguna relación legal entre las empresas, sus responsables tienen estrechos contactos. "Daminato Estudiantil es propiedad de mi prima, Josefina Daminato", admitió ayer Guillermo.
Es más, fuentes consultadas por este diario indicaron que la mujer administra la firma de viajes estudiantiles junto a su esposo, Gustavo Scaglione, quien sería propietario de al menos tres hoteles que la empresa posee en Bariloche: Candil, Ayelén y Bariloche Sky.
Incertidumbre
Hasta el momento y sólo en Rosario, los alumnos de 5º año de los colegios San Ramón, Las Heras, Técnica Nº3 y la Escuela Nº272 no saben a ciencia cierta si podrán concretar su viaje de estudios. A ellos se suman otros colegios del interior de Santa Fe (Arroyo Seco y Villa Constitución, entre otros) que también habrían contratado sus servicios.
Desde la Secretaría de Turismo de la Nación confirmaron ayer que "Daminato Estudiantil no presentó hasta el momento los contratos con sus prestadores de servicios en los destinos turísticos", es decir, hoteles, excursiones, transportes y asistencia médica. Este trámite es obligatorio para poder operar anualmente y el plazo venció el pasado 30 de marzo.
En el ambiente turístico ya es vox populi la situación que atraviesa Daminato Estudiantil. "Esta temporada no existió", sostuvieron algunos colegas en cuanto a la comercialización de viajes de estudio.
No obstante, desde la Asociación Rosarina de Agencias de Viajes (Arav) se sorprendieron por la noticia de la posible caída a la que accedieron a través de La Capital. Aunque, los principales competidores en el sector estudiantil dijeron estar en conocimiento de que "Daminato tiene grandes problemas en el servicio y serios incumplimientos".
Mientras tanto, los chicos del viejo secundario y el actual polimodal esperan ansiosos su viaje de egresados. Las esperanzas están puestas todavía en la posibilidad de acceder a las 9 noches, las excursiones y los cinco ingresos a boliches prometidos. Sin embargo, quizás sólo recuperen parte de lo pactado por unos 700 pesos promedio por alumno. Es que si son traspasados a otra firma no tendrán los mismos beneficios. "La cosa siempre es así, pero los chicos se terminan resignando ante la posibilidad de perder todo", dijo un coordinador que trabajó en Daminato Estudiantil.
Ante este panorama, la empresa se verá casi con seguridad obligada a establecer convenios con otros comercios del rubro para poder dar cumplimiento mínimamente con lo firmado, si hay intención de seguir operando. No será la primera vez. El año pasado, por ejemplo, Río estudiantil debió alquilarle a Daminato uno de sus hoteles.
Padres en alerta y oficinas vacías
La ola de rumores sobre las supuestas dificultades económicas de la empresa generaron una alerta entre los padres de los adolescentes. En rigor, las inquietudes comenzaron hace un mes, cuando intentar comunicarse con algún responsable de la firma se volvió una misión imposible.
"Estamos muy preocupados, nadie nos atiende, el gerente nunca está y los rumores sobre la quiebra son muy fuertes", indicó ayer Mirta García, la madre de un alumno del colegio San Ramón que junto a una decena de padres se acercó en busca de respuestas.
En el lugar sólo había un telefonista y la mayoría de las oficinas estaban desiertas. Sólo dos padres pudieron reunirse con uno de los responsables de la firma, Horacio Bartolini. "Nos pidió disculpas y nos aseguró que el contrato se respeta y los chicos van a viajar", señaló uno de ellos al término de la reunión, al tiempo que remarcó que "el gerente desmintió los rumores sobre la quiebra y se los adjudicó a la competencia".
Bartolini les prometió a los padres que se reunirá con ellos pasado mañana, pero no fueron muchos los que se mostraron ayer muy convencidos de llegar a un final feliz.
Mientras tanto, los chicos se aferran con fuerza a la idea de que su gran ilusión no se desplome. Por ahora, su viaje de estudios está en suspenso.
La Ciudad
