Deciden sobre una pericia en el caso Mariano Díaz

La víctima fue asesinada hace 3 años. Su padre cree que tal vez lo hicieron con un revólver que apareció ahora

El juez Jorge Eldo Juárez dejó abierta la posibilidad de peritar un revólver secuestrado en la investigación de un homicidio ocurrido en enero de este año con el objeto de determinar si es también el arma que se empleó para asesinar al chico Mariano Díaz en febrero de 1999. Juárez pidió a las partes del proceso -el fiscal y el abogado que representa a la familia Díaz- que propongan "puntos de pericia" para resolver si acepta el pedido.
El padre de Mariano, Osvaldo Díaz, sospecha que el revólver que estaba enterrado en un galpón de su barrio bien pudo haber sido empleado para matar al chico, que recibió un disparo en la cabeza y cuyo cadáver fue arrojado en Funes. El arma, del calibre 32, fue hallada en un sitio vecino a la casa de Isabel del Valle Moyano, que está acusada de encubrir el crimen del Mariano. Se trata de un revólver presuntamente utilizado para asesinar a Maximiliano Infante el 10 de enero último en Fisherton, no muy lejos del barrio donde vivía Mariano y donde aún reside Moyano.
Por el homicidio de Infante está detenido Gustavo Martinotti, un presunto barrabrava de Rosario Central de 28 años. Martinotti vive al lado de la casa de Moyano, y el galpón donde se encontró el revólver está pegado a estas dos viviendas.
En el juzgado de Juárez aún no tienen una opinión formada sobre la posibilidad de que el arma sea la misma, pero el magistrado se mostró partidario de facilitar una "amplia libertad probatoria" porque está interesado en desentrañar, por fin, quién mató a Mariano. Por eso nunca dejó de lado ninguna pista, más allá de que hasta ahora no hubo resultados.
Sin embargo, Juárez recién decidirá si ordena o no la pericia a Gendarmería Nacional (es lo que pidió Díaz) una vez que las partes involucradas le propongan qué aspectos del arma deberían quedar bajo la mirada de los expertos. Según sus voceros, el juez cree que esto será fundamental para determinar si la pericia se basa en una sospecha razonable o si se trata simplemente de una corazonada sin más fundamentos que la necesidad de Díaz de hallar al asesino.
La investigación de este crimen ya derivó en la detención y el procesamiento de varias personas. En junio de 1999 cuatro hombres fueron imputados del homicidio y más tarde terminaron desincriminados. En marzo de 2000 la policía detuvo en Río Gallegos a Moyano y su concubino, Claudio Ibáñez, quienes más tarde fueron acusados de encubrir a los homicidas y de deshacerse del cadáver del chico. Ambos apelaron su procesamiento pero la Cámara Penal todavía no se pronunció sobre este punto.