Dos presos por el crimen de un changarín en una villa miseria

Están acusados por el asesinato de Guter González, en Gálvez y Castellanos

Dos jóvenes fueron detenidos bajo la acusación de haber participado en el homicidio de Guter González, el changarín uruguayo de 42 años que la madrugada del jueves fue asesinado de un balazo por dos hombres en la puerta de su casa ubicada en la villa miseria de Gálvez y Castellanos.
Los sospechosos fueron identificados como Miguel Angel Barrios y Javier Marcelo Muñoz, ambos de 22 años. Los detenidos fueron apresados ayer por efectivos de la comisaría 13ª en un asentamiento precario situado en Virasoro entre Lavalle y Alsina.
Según indicó el comisario principal Daniel Barrile, titular de la comisaría 13ª, Barrios fue sindicado como uno de los hombres que llegó a la casa de la víctima por un testigo del suceso. Además, el jefe policial sostuvo que Muñoz habría disparado el balazo que terminó con la vida de González.
Barrile comentó que el changarín fue asesinado por una deuda que mantenía con los agresores. "Al parecer, Barrios le había dejado a González unos compacts para vender y cómo no les había entregado la plata de la reventa decidieron matarlo", explicó.
El hecho ocurrió a las 4 de la madrugada del jueves cuando González dormía junto a su esposa y cinco hijos en una casa humilde de Gálvez 3840. A esa hora dos hombres golpearon la puerta de chapa con postigo ubicada en la parte trasera de la vivienda.
González y su mujer los atendieron a través del postigo y no les permitieron entrar. Los intrusos reclamaron dinero y, como el changarín se negó, se originó una discusión durante la cual uno de los hombres rompió el vidrio de la puerta y le disparó en el pecho con un arma de bajo calibre.
El proyectil hirió a González en el corazón y le provocó la muerte casi en el acto mientras los dos hombres escaparon sin llevarse nada. En tanto, Barrile sostuvo que los dos jóvenes apresados tienen antecedentes por robo y hurto calificado.
La víctima se ganaba la vida reparando heladeras en un taller, mientras que su mujer, Miriam Díaz, de 42 años, colaboraba en el comedor de una escuela durante la época de clases y trabajaba para una empresa de instalación de alarmas.
Los homicidas se habían presentado en la casa en la tarde del miércoles, cuando preguntaron por González y luego por su esposa a uno de los cinco hijos de la pareja, pero en ese momento tanto el changarín como su mujer se habían ido a trabajar.

El changarín fue asesinado en la puerta de su casa.