-Miles de jóvenes aspiran a irse del país, la mayoría no tiene trabajo y estudiar se hace cada vez más incierto. ¿Qué sentido tienen para ellos frases como "tenés que estudiar para ser alguien la vida" o "estudiá para tener un buen trabajo"? -El sentido de estas frases habría que conversarlo con los propios jóvenes. Pero, puedo contar lo que me respondieron mis alumnos de Ciencias de la Educación y del magisterio en una investigación, sobre interrogantes similares. Todos reconocen que estudiar ya no es garantía para conseguir trabajo, pero piensan que de todas formas, brinda mayores posibilidades. Lo cual plantea que la educación sigue siendo pensada en los términos utilitarios del mercado de empleo. Y aquí creo hay una diferencia entre esto que nos decían nuestros viejos, "tenés que estudiar ser alguien en la vida" y "estudiá para conseguir un empleo", que me parece un slogan más actual. Es que nuestras identidades se construyen fuertemente en torno del trabajo. Quizás en un mundo sin empleo, deberíamos revisar esto de la educación para el trabajo y las posibilidades que habilita o cierra en uno y otro caso. Pero, volviendo a las expectativas de futuro, recuerdo una entrevista en particular, la de una alumna que me dijo: "Creo que en esta Argentina estudiar algo no ayuda mucho a concretar tus sueños, pero en mi caso estudio esto (no algo) porque confío en que la educación puede habilitar el futuro". Quizás de esto se trate cuando digo volver a soñar, es decir de construir expectativas, querer para otro, hacer existir el futuro, ofrecer un lugar en el mundo.
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