Año CXXXV
 Nº 49.397
Rosario,
jueves  21 de
febrero de 2002
Min 19º
Máx 27º
 
La Ciudad
La Región
Política
Economía
Opinión
El País
Sociedad
El Mundo
Policiales
Escenario
Ovación
Suplementos
Servicios
Archivo
La Empresa
Portada


Desarrollado por Soluciones Punto Com






Solicitan una pericia por el crimen de un menor
Creen que Mariano Díaz pudo haber sido asesinado con un revólver hallado en la pesquisa de otro homicidio

El padre de Mariano Díaz, un chico de 13 años asesinado el 19 de febrero de 1999, pidió ayer al juez que investiga ese crimen que perite un arma encontrada en la investigación de otro homicidio para saber si es o no la que emplearon para matar a su hijo. Se trata de un revólver calibre 32 que la policía halló en un galpón contiguo a la casa de una mujer acusada de encubrir el crimen de Mariano. El arma estaba enterrada en ese lugar y los familiares del chico creen que puede ser la que emplearon sus asesinos.
Si el juez Jorge Eldo Juárez accede al pedido de Osvaldo Díaz, el revólver será peritado por Gendarmería Nacional. La respuesta del magistrado al pedido formulado ayer podría conocerse hoy mismo, aunque tanto Díaz como su abogado, Eduardo Sosa, descartaban ayer que Juárez no se opondrá a la realización de la pericia porque siempre se mostró interesado en resolver este caso.
El arma estaba enterrada en un galpón del barrio 7 de Septiembre. La policía la encontró cuando investigaba el crimen de Maximiliano Infante, asesinado el 10 de enero en Fisherton. Por este caso está detenido el barrabrava de Rosario Central Gustavo Martinotti, quien vive al lado de la casa de Isabel del Valle Moyano.
Una de las hipótesis históricas del caso de Mariano es que el chico fue asesinado en casa de Moyano. Por eso la mujer fue procesada por Juárez junto a su concubino, Claudio Ibáñez, como encubridores. En la causa no hay posibles homicidas identificados, ya que el juez procesó a varias personas pero luego la Cámara los desincriminó por falta de pruebas.
La condición de vecinos de la pareja Moyano-Ibáñez con Martinotti fue lo que despertó las sospechas de Osvaldo Díaz cuando supo que la policía había incautado un arma que supuestamente pertenece al barrabrava. Sin embargo, se trata de una sospecha muy preliminar que sólo podrá ser despejada por la pericia técnica que pidieron Díaz y su abogado.


Diario La Capital todos los derechos reservados