El interventor del Pami, José Corchuelo Blasco, anunció ayer que rescindirá los contratos con la industria de los medicamentos, que representan 22 millones de pesos para la institución, debido a la imposibilidad de poder afrontar ese pago. Durante el informe brindado ante la comisión de Salud de la Cámara de Diputados, el funcionario dijo que esa rescisión se llevará adelante para "hacer un Pami más sustentable".
"El convenio que había firmado el Pami con los representantes de la industria de los medicamentos para proveer de remedios a los afiliados será rescindido debido a que plantea condiciones muy duras de pago para la institución y no podemos afrontarlo", explicó Corchuelo Blasco.
El interventor aseguró que "las cláusulas de ese contrato estaban planteadas de modo tal que los medicamentos no llegaban a los beneficiarios, además que no tenemos el dinero para pagar los 22 millones de pesos que establece ese convenio".
"En esta emergencia sanitaria que vivimos vamos a establecer un ránking de medicamentos de alta, mediana y baja complejidad para proveer a nuestros afiliados".
Corchuelo Blasco adelantó a los diputados que el lunes próximo "será lanzada oficialmente la campaña de vacunación antigripal que a la institución le costará 15 millones de pesos, cuando el año pasado salió siete millones". El interventor destacó que esos 15 millones "saldrán de la eliminación total de horas extras que se aplicó a todo el personal del Pami".
El funcionario entregó a los diputados de la comisión de Salud, tres carpetas con toda la documentación sobre la situación actual del Pami, "lo que para mí, elaborarlo, representó un dolor profundo y una congoja muy grande sobre cómo es el estado actual de la obra social".
Una deuda de 1.800 millones
El interventor dijo que el Pami "tiene una deuda de 1.800 millones de pesos, 800 de ellos exigibles por parte de los acreedores y 400 millones de deuda financiera, mientras que la recaudación de diciembre del año pasado sólo llegó a los 116 millones de pesos".
"Por eso, el Pami necesita 170 millones de pesos por mes para ser sustentable, por lo que su situación se normalizaría si en el presupuesto se garantiza esa cifra y también nos colocaría en una situación más creíble frente a nuestros acreedores".
Indicó además que, "hoy por hoy, nadie sabe cuántas personas trabajan en el Pami en todo el país, entre personal estable y contratado", y aseguró que "en mi gestión no voy a firmar ningún contrato y las 25 personas que me acompañan se irán conmigo cuando termine mi gestión".
Sobre la actitud de los prestadores, dijo "genera mucha angustia entre nuestros ancianos y diría que es casi irreverente que no se los atienda con la dignidad que merecen, ya que ayer empezamos a abonar las facturas del mes de noviembre. En un mes de trabajo ya pagamos tres medias cápitas y sólo debemos tres meses en el marco de una crisis económica muy grande", añadió al respecto.
Corchuelo Blasco remarcó que "representantes de la Sigen participan de las reuniones del directorio del Pami e invitamos a que tres diputados de esta comisión de salud también lo hagan. Queremos establecer las bases para que los futuros cargos en la institución sean por concurso, con la participación de fundaciones como Poder Ciudadano en el control de las designaciones". (Télam)