Año CXXXV
 Nº 49.394
Rosario,
lunes  18 de
febrero de 2002
Min 18º
Máx 29º
 
La Ciudad
La Región
Política
Economía
Opinión
El País
Sociedad
El Mundo
Policiales
Escenario
Ovación
Suplementos
Servicios
Archivo
La Empresa
Portada


Desarrollado por Soluciones Punto Com





Insólito golpe de dos hombres armados en pleno centro de Rosario
Secuestran a conocido empresario de la noche y le roban 9.500 pesos
A bordo de su auto lo obligaron a "pasear" por la ciudad y lo abandonaron a tres cuadras de una comisaría

Un conocido empresario de la noche rosarina fue secuestrado ayer a la mañana por dos delincuentes que lo interceptaron cuando intentaba ingresar con su auto a la cochera del edificio donde vive, en 1º de Mayo al 900, y tras obligarlo a conducir por distintas calles de la ciudad lo abandonaron en la zona oeste. Al huir, los ladrones le robaron 9.500 pesos en efectivo y el vehículo, que horas después fue hallado abandonado en Montevideo al 3900.
Fuentes policiales indicaron a La Capital que el atraco al comerciante presenta algunos puntos oscuros y no descartaban que se haya tratado de un robo "por entrega".
La víctima del robo es Jorge Giannantonio, conocido en el ambiente nocturno como el panadero, propietario del tradicional bar Open Pringles -ubicado en Córdoba al 1600- y de la discoteca Shambala -situada en la zona ribereña norte, cerca del arroyo Ludueña-. Este último emprendimiento es uno de los lugares de mayor convocatoria de público, mayoritariamente de entre 18 y 20 años, y la titularidad sería compartida por un grupo de socios.

Un regreso interrumpido
Alrededor de las 7.30 de la mañana Giannantonio regresaba a su departamento ubicado en 1º de Mayo 923, a escasos metros del Monumento Nacional a la Bandera. Voceros policiales indicaron que el empresario regresaba de la confitería bailable ubicada en la zona ribereña y en su poder llevaba una pequeña caja de seguridad con 9.500 pesos que serían producto de la recaudación de toda la noche.
Giannantonio manejaba su BMW 328, color negro y con vidrios polarizados, y al detenerse frente al portón de la cochera del edificio fue interceptado por dos desconocidos que, armas en mano, lo obligaron a abrir las puertas del auto.
Uno de los maleantes se sentó como acompañante del conductor. El otro, en cambio, se ubicó en el asiento trasero del BMW, detrás del empresario. Justamente el que iba atrás, según trascendió de la denuncia realizada en la seccional 6ª, era el que amenazaba de muerte a Giannantonio con un arma en la cabeza. A partir de ese momento, los ladrones hicieron poner en marcha el coche y salieron con el empresario virtualmente secuestrado por distintas calles del centro y la zona oeste de la ciudad.
Allegados a la investigación describieron el recorrido que los delincuentes obligaron tomar al Panadero. De acuerdo a lo que trascendió, el BMW negro partió desde 1º de Mayo al 900 para tomar por Rioja en dirección al oeste. Así llegó hasta Entre Ríos, después giró hacia la izquierda y continuó hasta avenida Pellegrini. Por esa importante arteria delincuentes y víctima siguieron hasta Lavalle por donde doblaron hacia el norte. Al llegar a la esquina de Lavalle y Montevideo, los ladrones hicieron detener el coche.
Entonces uno de ellos tomó la caja de seguridad en la que Giannantonio llevaba 9.500 pesos, bajó del coche y se fue caminando. Después, el empresario y el restante ladrón continuaron viaje en dirección al norte hasta que llegaron a San Luis. En esa esquina el coche giró hacia el este y no se detuvo hasta que llegar a la intersección con Cafferata. Antes de esa parada final, la policía supone que el delincuente que quedaba todavía junto con el comerciante se cambió de lugar y tomó el volante del vehículo.
Una vez en Cafferata y San Luis, a sólo tres cuadras de la seccional 6ª, Giannantonio fue obligado a descender del BMW y entonces el delincuente desapareció llevándose consigo el costoso automóvil.
Alrededor de las 8.30 la policía ya había tomado conocimiento del asalto y posterior robo del vehículo por lo que se implementó un operativo de búsqueda que dio resultado rápidamente. Es que el rodado fue encontrado abandonado y en perfecto estado en Montevideo al 3900, es decir a pocos metros del lugar donde había descendido el ladrón que se apoderó del botín.
El hecho fue denunciado en la seccional 6ª. Fuentes policiales estaban convencidas ayer que el asunto se trató de una "batida" o "una entrega", ya que no es casual que el empresario haya sido interceptado por dos hombres en la puerta de su propia cochera y en momentos que llevaba consigo la recaudación de su local.



Giannantonio fue asaltado en la puerta de su casa.
Ampliar Foto
Diario La Capital todos los derechos reservados