La deuda que la Nación acumula con la provincia por el alojamiento de los presos federales y los fondos provenientes de la venta del Banco Hipotecario, que forman parte del proyecto de financiación para la futura cárcel de Piñero, fueron tema de una reunión entre el ministro de Gobierno Lorenzo Domínguez, el Secretario de Hacienda de la Nación, Oscar Lamberto; y el viceministro de Justicia, Guillermo de Santi.
La deuda de la Nación por los federales asciende a unos 11 millones de pesos y se remonta a 13 años atrás. Hasta hace 15 días, la situación se había vuelto tan insostenible que las autoridades evaluaron la posibilidad de trasladar a todos los detenidos dependientes de la Nación a dependencias en otras provincias. La reunión en Buenos Aires descomprimió la amenaza y la Nación se comprometió a comenzar a hacer pagos a cuenta. "Si vinieran esos fondos contaríamos con el dinero para comenzar el proyecto de emergencia", lanzó optimista Domínguez.
Asignaturas pendientes
El proyecto para el penal de Piñero, en cambio, depende de que Oscar Lamberto "encuentre" los 30 millones de pesos que le corresponden a Santa Fe por la venta del Hipotecario y están dentro del Fondo Fiduciario. De nuevo los números cierran en potencial, ya que el presupuesto para una cárcel modelo con 500 plazas está calculada en unos 27 millones. "Ese dinero está o está, de hecho fiduciario significa que se da fe que existe como sea, con corralito o con devaluación", señaló el ministro.
El otro proyecto postergado es el de la cárcel de Timbúes. Pero ese plan depende de un emprendimiento privado que haría la inversión y se encargaría del penal durante 30 años, durante los cuales cobraría un canon a la provincia. Y ahí si cuentan corralitos y devaluaciones.