El mercado automotriz también está deprimido y busca un repunte. Por eso, sus representantes le pidieron al gobierno que destrabe un poco el corralito. "Esta sería una manera de que el gobierno pueda devolver parte de sus ahorros a la gente pero no en dólares, sino con cheques cancelatorios que sirvan para comprar vehículos", explicaron desde las concesionarias de Rosario, que se pusieron a tono con sus pares nacionales. En este marco, el precio de los cero kilómetro de fabricación argentina aumentó un 40 por ciento y los importados se fueron al doble.
La propuesta para reactivación el comercio sectorial apunta a lograr un aumento de las ventas. Con eso también aumentará la recaudación impositiva y podrán mantener el nivel de empleo, según dijo el presidente regional de la Asociación de de Concecionarios de Automotores de la República Argentina (Acara), Armin Reutemann.
La idea apunta a contribuir al mejoramiento de los indicadores de la actividad económica con el consiguiente impacto psicológico sobre la opinión pública "sensible al aumento de la productividad y las ventas del sector", dice el escrito presentado ayer en Buenos Aires.
Es que en la Argentina se llegaron a vender 500 mil autos por año y actualmente hay fábricas preparadas para generar 750 mil unidades. Sin embargo, la realidad señala que en el marco del proceso actual se llegarán a vender no más de 60 mil unidades debido a varios factores, "como el corralito y la paralización de la economía", dijo Reutemann.
La propuesta tuvo como destinatarios a distintas áreas del gobierno nacional, al Senado y a la asociación que agrupa a los fabricantes de autos (Adefa). Consiste en liberar total o parcialmente los depósitos a plazo fijo en dólares previa pesificación y, a través de un cheque cancelatorio, se pueda llevar a cabo la compra de un auto cero kilómetro."La idea es volver al corralito de (el ex ministro de Economía Domingo) Cavallo", resumió el dirigente de las concesionarias locales.
Se trata de una iniciativa que permita canalizar parte de los ahorros hacia bienes durables. "Ya que el gobierno no puede devolver los dólares porque no existen, sería importante que cree una moneda virtual que le sirva al cliente para que compre un auto, dijo antes de citar un ejemplo gráfico: "Como concesionario lo deposito en mi cuenta, le pago a la fábrica que, a su vez, lo hace con los proveedores de piezas y empleados. Así, el dinero no sale del corralito".
Según las concesionarias, la propuesta elimina la incertidumbre que existe respecto de la devolución efectiva de los ahorros. "Así se mejora el poder adquisitivo de los depósitos en dólares en términos reales", agregó en torno a la necesidad de generar ventajas que puedan significar que se mueva el mercado automotor. "Es la industria que más masa económica moviliza en la Argentina", consideró.
El estudio presentado por las empresas comercializadoras pretende establecer cuánto significa la creación del cheque cancelatorio a la economía nacional.
En cuanto a los certificados que ya dispuso el gobierno para adquirir autos y viviendas, Reutemann no se mostró de acuerdo. "El que lo reciba no tiene una garantía real de que le devuelvan el dinero".
La economía vigente causó en el mercado automotriz, el peor impacto en los últimos tiempos. "El mercado actual puede llegar con suerte a comercializar a 60 mil unidades al año. Para decirlo de otra manera, este número es peor que la peor cantidad de los últimos 20 años", ejemplificó.
Ante esto, la situación en Rosario se avizora extremadamente crítica. "De seguir así, en los próximos 60 días, el 70 por ciento de las concesionarias podría caer. La venta es magra, inexistente", resumió. Hasta el momento el gobierno no emitió respuestas a la iniciativa presentada por Acara.
| 
Creen que la venta de este año no superará las 60 mil. |  | Ampliar Foto |  | |
|
|
La Ciudad
