La Corte Suprema de Justicia de la Nación "no pretende desestabilizar al presidente Eduardo Duhalde ni realizar actos que puedan empeorar la gravísima situación del país", afirmó ayer una alta fuente de ese tribunal. "No obstante, la Corte es guardiana de la Constitución y de los derechos individuales", agregó.
La fuente, que pidió reserva de su identidad, dijo que hacía esta declaración como respuesta a supuestas afirmaciones de algunos legisladores del PJ que habrían deslizado que el alto tribunal pretende voltear al gobierno nacional.
"Eso es absolutamente falso; la Corte conoce su función y es fiel a ello, conoce los estados de emergencia y sabe poner límites, pero dentro del estado de derecho. Por ello, la Corte no pretende desestabilizar al presidente Eduardo Duhalde ni realizar actos que puedan empeorar la gravísima situación del país", aseveró el informante.
"La Corte -insistió- no efectuará acto alguno que agrave la situación, sino todo lo contrario: va a colaborar para salir de la crisis que atravesamos".
Esta declaración pareció un mensaje conciliador hacia la administración Duhalde después del enfrentamiento que se desató entre el poder político y el máximo tribunal de Justicia del país a partir de que la Corte declaró inconstitucional el corralito bancario en un caso particular.
También se produjo en momentos en que en el Congreso se tramita un proceso de juicio político a la Corte. En los próximos días los diputados deberán expedirse sobre los cargos que se imputan a los ministros del tribunal.
"Queremos juicio, no linchamiento"
Mientras, en Rosario, la Asociación de Abogados Laboralistas volvió a pedir frente a los Tribunales provinciales el juicio político de los integrantes del alto tribunal. El presidente de la organización, Vildor Garavelli, dijo una vez más que los ministros no deben renunciar sino que deben someterse a juicio, y aclaró que los abogados no piden el "linchamiento" de los jueces de la Corte sino su remoción por mecanismos constitucionales.