El gobierno de Eduardo Duhalde comparte "el espíritu" de la advertencia formulada por el Papa Juan Pablo ll acerca de que la crisis en la Argentina pone en peligro la estabilidad democrática y la solidez de las instituciones públicas, afirmó ayer el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich.
De todos modos, el viceministro de Economía, Jorge Todesca, mostró su confianza en que la sociedad y las instituciones, a pesar de la debilidad institucional que existe, encuentren fuerzas para mantener la democracia, aun en el marco actual de "convulsión social muy fuerte".
Capitanich señaló que el gobierno está trabajando a través de la concertación para fortalecer la democracia e hizo hincapié en la preocupación oficial por "recuperar la credibilidad" en las instituciones.
"Nosotros compartimos el espíritu de lo manifestado por Su Santidad, compartimos el contenido y entendemos claramente que los objetivos del gobierno nacional están en directa relación con lo que el Papa manifiesta", señaló.
Al ser consultado sobre el tema, Capitanich dijo que "la mesa del Diálogo Argentino con la cooperación de la Iglesia es fundamental para pacificar los espíritus y para generar mecanismos de consenso en la Argentina".
Precisamente, los máximos representantes del Diálogo Argentino se acercaron ayer a la Nunciatura Apostólica Romana de Buenos Aires para agradecer las palabras y la preocupación del Santo Padre.
El miembro del Colegio Cardenalicio en el Vaticano, Jorge Mejías, sostuvo que la advertencia papal indica que "los argentinos mismos, con las ricas cualidades que los distinguen, han de ser los protagonistas y artífices principales de la reconstrucción del país".
Desde Roma, el prelado consideró que la exhortación del Pontífice "es absolutamente indiscutible: hay una profunda crisis social y económica que afecta a toda la sociedad, y que además pone en peligro la estabilidad democrática".
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La Ciudad
