Juan Manuel Llop presentó en sociedad el nuevo esquema que ensayó durante toda la pretemporada para hacer frente al torneo Clausura que se iniciará para los rojinegros el próximo domingo ante Banfield. Y en el análisis previo puede decirse que es un tanto arriesgado y que puede, de no corregirse algunas detalles, darle algunos dolores de cabeza.
En la defensa Vojvoda, Fernández y Crosa pueden otorgarle cierta seguridad. Además, Ponzio y Grech tienen la obligación de retroceder cuando su equipo es atacado y de esa forma ese sector se siente fortalecido.
El mayor problema reside en el mediocampo. Leonardo Ponzio, quien rindió de muy buena manera en el campeonato anterior, fue desplazado hacia la derecha y el de Las Rosas lejos estuvo de convertirse en aquel volante impasable de tiempo atrás. La noche de ayer seguramente será una de las peores desde que jugó en la primera de Newell's.
Diego Bono ocupó la posición de volante central tuvo una jornada complicada, ya que debió vérselas con Walter Gaitán. Y el jugador de Ceres la pasó mal y perdió en gran parte de los noventa minutos. Para tratar de frenar al talentoso jugador xeneize debió recurrir a las infracciones, en muchos casos desmedidas que le habrían merecido -por lo menos- alguna tarjeta amarilla.
Arriba Rosales se mostró muy veloz y peligroso, mientras que el Toro Gigena no llevó demasiado peligro. Sólo fue al choque y trató de ganar por arriba, pero muy poco como para pretender entrar en la gente, esa que ayer no lo despidió de buena manera.
En síntesis, el Newell's versión 2002 es pretencioso, pero se deberá buscar una solución en la zona media y en el ataque.
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La Ciudad
