El presidente Eduardo Duhalde dejó entrever frente a sus colaboradores la posibilidad de vetar la recientemente sancionada ley de quiebras, algo que se sintoniza con los pedidos del Tesoro de Estados Unidos y los organismos internacionales de crédito. Según algunos analistas, el viaje del ministro de Economía, Jorge Remes Lenicov, a Washington -sin el veto de tres de los artículos de la nueva normativa- complicará el diálogo en pos de conseguir la plata fresca que busca el gobierno para poder poner una de las patas que sustenten el presupuesto 2002 que presentaron la semana pasada. Desde el Palacio de Hacienda ya dejaron entrever a senadores y diputados que el Ejecutivo vetará los tres artículos. Por esta razón, legisladores de ambas cámaras comenzaron a trabajar para crear su propia comisión para intervenir con normas generales en el marco regulatorio de las negociaciones entre acreedores y deudores.
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