El promedio no le da respiro a Central Córdoba. Por eso, por más que el reinicio de la actividad coincida con la última fecha de la primera fase, para los charrúas el partido de esta tarde en el Gabino Sosa ante San Martín de San Juan será fundamental por el descenso. No estarán muchos de los titulares y habrá que ver si los pibes podrán afrontar tamaño desafío.
Hace casi un mes el grueso del plantel decidió parar por falta de pago de noviembre, diciembre y medio aguinaldo pero no pudo lograr su cometido. Mientras, el técnico Ricardo Palma debió arreglárselas con pibes de inferiores y con aquellos jugadores pagados por empresarios. Por eso, Córdoba no tendrá problemas para juntar los 8 profesionales requeridos.
En medio de tanto caos, sorpresivamente el equipo charrúa se reforzó en el puesto que más problemas tuvo: el del arquero. Firmó el ex salaíto Walter De Lemos, tras quedar libre por falta de pago en el club rival de esta tarde, y ayer sumó la grata novedad del retorno de Fabián Cancelarich, quien estaría para jugar la próxima semana. Además, pese a la crisis, anoche concentró en el hotel Garden.
Palma se las arregla como puede y con sus chicos tratará de hacer lo mejor posible. Al banco sentará a Salomón, Ibarra, Guiñazú, Toffoletti (regresó a practicar junto a Romero porque habían firmado los recibos de sueldos en la era Bulfoni) y Mansilla.
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La Ciudad
