"Nos va llegando el agua, como a todos", confesó ayer con pesar el gobernador Carlos Reutemann. Por primera vez, el mandatario sostuvo que Santa Fe corre riesgo de entrar en default, a pesar de estar en mejores condiciones financieras que otras provincias. La confirmación de que Buenos Aires se declaró en cesación de pagos -hecho que se produjo anteayer- y la intención del gobernador cordobés José Manuel de la Sota de pedirle al gobierno nacional que las provincias sean declaradas en quiebra, son los antecedentes que el Lole marcó como los indicadores de una realidad a la que no podrá escapar ningún estado provincial argentino. "Hoy hemos visto que dos provincias que son muy similares a la nuestra plantearon la cesación de pagos, nosotros no somos un ente separado", enfatizó.
En una conferencia de prensa que ofreció ayer en Rosario, pasado el mediodía, después de largas audiencias que mantuvo durante la mañana con sectores empresarios santafesinos, representantes de la Corriente Clasista y Combativa, la CTA y las Mujeres en Lucha (ver página 11), el gobernador expresó con crudeza que la situación del país es tan grave que no se podrá salir de esta crisis "sin dolor".
Dijo desconocer los detalles del plan económico que el gobierno nacional tiene previsto presentar el sábado y admitió que la decisión "clave" para superar los problemas es "política".En ese sentido reconoció que los próximos anuncios económicos dejarán al desnudo que, sea cual sea el camino que se elija, habrá damnificados: "Se planteará que si se pesifica por una dirección va a haber estos beneficiados y estos perjudicados; y que si se pesifica por otra dirección, serán otros los beneficiados y otros los perjudicados".
También señaló que la provincia no puede dar respuestas que le competen a la Nación y puso como ejemplo el planteo que la agrupación Mujeres en Lucha (que nuclea a mujeres vinculadas al sector agropecuario) le hizo en horas de la mañana sobre la necesidad de que las deudas superiores a 100 mil dólares también sean pesificadas: "Si ellas piensan que le podemos dar respuestas estamos equivocando el camino", comentó y agregó que "esas respuestas están dentro de un plan que se inició hace 20 días, que va en una determinada dirección"
También señaló que la provincia no puede dar respuestas que le competen a la Nación y puso como ejemplo el planteo que la agrupación Mujeres en Lucha (que nuclea a mujeres vinculadas al sector agropecuario) le hizo en horas de la mañana sobre la necesidad de que las deudas superiores a 100 mil dólares también sean pesificadas: "Si ellas piensan que le podemos dar respuestas estamos equivocando el camino", comentó y agregó que "esas respuestas están dentro de un plan que se inició hace 20 días, que va en una determinada dirección"
El país "refundido"
El martes, el presidente Duhalde dijo que en Argentina "estamos refundidos", una impresión que Reutemann comparte. Incluso reconoció que el efecto contagio hacia los estados provinciales se avecina. "Las provincias no van a estar lejos de la quiebra", admitió, y explicó que "nos dimos cuenta de que es un círculo vicioso. La gente viene a plantear que no quiere pagar impuestos, nadie quiere hacer tributos por una razón u otra y eso lleva a que no haya recaudación y evidentemente lleva a la quiebra del Estado".
\El gobernador señaló que en el seno de su gobierno estuvieron analizando seriamente el problema de los escasos recursos con los que cuenta Santa Fe a partir de una violenta caída de la recaudación "con el agravante de que no tenemos más crédito, no hay financiamiento, no hay recursos". Entonces, apuntó, "lo que se va a producir inevitablemente es lo que ya se planteó la semana pasada -en la reunión de gobernadores con Duhalde- y que es el default de las provincias".
\La semana pasada, los gobernadores le plantearon a Duhalde la necesidad de resolver las deudas provinciales, sea a través de una extensión del default declarado por la Nación o a través de la pesificación de los créditos. Con unos 400 millones de dólares de deuda flotante, Santa Fe no está en los papeles dentro de los Estados más comprometidos pero los efectos de la devaluación sobre los pasivos, así como el recorte de los recursos fiscales, terminó por potenciar ese problema.
\El lunes, el ministro de Hacienda de Córdoba señaló que De la Sota le pidió al gobierno que se exima a las provincias de pagar sus deudas en el año 2002, tal como lo decidió la Nación. El mismo día, Buenos Aires se declaró en cesación de pagos.
\"Hoy veo que hay dos gobernadores que lo han planteado", comentó Reutemann, en referencia al default. Cabe destacar que Chaco, Chubut, Río Negro y Tucumán ya han incumplido sus compromisos.Aunque Santa Fe siempre se destacó por el ordenamiento de sus cuentas públicas y por ser una de las pocas provincias en todo el país que siguió pagando los sueldos en pesos sin emitir bonos propios, el agravamiento de la crisis con una caída profunda de la recaudación, el aumento de la recesión y el corte de los créditos externos, empezaron a salpicarla, al punto de que reconoció, sin vueltas, que "el agua nos va llegando como a todos, el agua llega, inevitablemente".
\El mandatario santafesino aseguró que hasta ahora "pudimos mantener la armonía de las obligaciones del Estado". Destacando que "hemos hecho hasta el máximo de lo posible" y adelantando un panorama aún más complejo que el actual dijo: "Vemos que dos provincias (Buenos Aires y Córdoba) muy similares a la nuestra plantearon la quiebra, nosotros somos Argentina y somos parte de todas las provincias". Sobre el futuro inmediato de Argentina su análisis tampoco es muy alentador. El Lole, que insistió con que la de este país es un crisis única por sus características, expresó que "a todos los países que pasaron por una situación parecida a esta les costó en el primer año una caída del PBI no menor al 15%. Todos los que saben vaticinan para Argentina una misma realidad en el primer semestre, con tendencia a incrementarse la desocupación".
La Ciudad
