Una posible falla mecánica le habría impedido a una banda de piratas del asfalto hacer desaparecer un camión con su carga completa de aceite comestible. El vehículo había sido robado cerca de la ciudad bonaerense de San Pedro y, luego de abandonar al chofer en un campo de la zona de Fighiera, fue dejado a una cuadra de la villa La Cerámica, en la zona noroeste de Rosario.
Según fuentes policiales, agentes del Comando Radioeléctrico alertados por un llamado telefónico detectaron la noche del jueves, en Valentín Gómez y Aráoz, que un grupo de entre 12 y 15 muchachones trataban de empujar un camión con acoplado presuntamente abandonado hacia el interior de la villa y "con intenciones de saquearlo".
Al hacerse presente en el lugar los policías comprobaron que el camión en cuestión era un Fiat Iveco patente BAD576, con acoplado dominio VEZ030, cargado con cientos de cajas de aceite comestible marca Vicentín.
La presencia policial hizo que el grupo se desbandara en diferentes direcciones pero siempre hacia adentro del asentamiento precario. Entonces, los agentes comprobaron que el camión tenía las puertas abiertas, algunas prendas de vestir en su interior y varios papeles que documentaban el cargamento que tenía. Además, observaron que el rodado tenía sus llaves de contacto puestas, por lo que fue secuestrado y trasladado hasta la seccional 10ª que tiene jurisdicción en el lugar.
De acuerdo a voceros de la policía, poco después se estableció que el Fiat Iveco había sido asaltado por un grupo de piratas del asfalto que interceptaron al chofer en cercanías de San Pedro, en el norte de la provincia de Buenos Aires.
Omar Cejas, el camionero en cuestión, denunció que entre las 15 y 16 horas del jueves se le cruzaron en el camino dos automóviles con varios hombres en su interior que le exhibieron armas largas y lo obligaron a detenerse a un costado del camino.
A punta de pistola
La denuncia de Cejas no abunda en detalles, pero asegura que a punta de pistola fue introducido en uno de los autos, mientras que uno de los delincuentes se ubicaba al mando del Fiat Iveco.
El camionero permaneció un par de horas virtualmente secuestrado y siendo amenazado de muerte en varias ocasiones. Hasta que finalmente, la banda abandonó al hombre en un campo cercano a la localidad de Fighiera. En la seccional de ese pueblo radicó la denuncia.
Los agentes de la seccional 10ª establecieron que el camión encontrado en Valentín Gómez y Aráoz era el mismo denunciado por el robo en Fighiera. También comprobaron que la carga de aceite comestible estaba intacta y no faltaba nada del interior del vehículo.
Los investigadores sospechan que el Fiat Iveco pudo tener algún problema mecánico antes de que los ladrones pudieran entregar o deshacerse de la carga. "Cuando los policías le dieron marcha para llevarlo a la comisaría el motor se detuvo varias veces. Por eso se hará una pericia técnica para confirmar que sea así", comentó un vocero policial.
La otra posibilidad es que algunos vecinos de la villa La Cerámica hayan llegado antes que los compradores o pasadores de la mercadería, y al advertir que nadie se acercaba al rodado o que el mismo había sido abandonado, hayan decidido saquearlo.