Cosquín: Todas las voces, todas

La ciudad de Cosquín está ubicada sobre la ruta nacional 38, a 47 kilómetros de Córdoba y es cabecera departamental. Se encuentra a 720 metros sobre el nivel del mar y posee un microclima especial con un promedio anual de 20º de temperatura. Sus atractivos geográficos y bondades climáticas la convierten en un lugar ideal para el esparcimiento y el relax.
Además ofrece a los visitantes una variada oferta de servicios de alojamiento, gastronomía, entretenimientos y espectáculos, entre los que se destaca el Festival Nacional de Folclore, que arrancó ayer y culminará el próximo domingo con la presentación de Los Nocheros.
Esta ciudad, con sus 16.866 habitantes, fue uno de los primeros asentamientos españoles en el valle de Punilla. El trazado original de la villa es de 1877 y su desarrollo estuvo íntimamente ligado -por su clima benévolo- al tratamiento terapéutico de enfermedades respiratorias realizado en hoteles y estancias.
Sin embargo en los últimos 50 años la ciudad ha alcanzado renombre por la importancia del Festival Nacional del Folclore que todos los años se lleva a cabo en el anfiteatro Próspero Molina, durante la última quincena de enero. De allí han surgido muchas de las grandes voces del folclore nacional y así se ha ganado el merecido título de "Oído musical del país". También es conocida por la realización de la Feria Nacional de la Artesanía Popular.
La Toma es el nombre del balneario más tradicional, popular y familiar de Cosquín. Dispone de servicios sanitarios, estacionamiento, guardavidas, camping, pasarelas, proveedurías y restaurantes.
El Complejo Nivelador está integrado por dos balnearios. Uno de ellos magnifica el paisaje con un espejo de agua de mil quinientos metros de extensión por cuarenta de ancho. El restante cuenta con un embalse de respetable profundidad y sus orillas están provistas de una bella y reparadora arboleda. Es el balneario preferido por los jóvenes y los turistas más exigentes que llegan a la ciudad.
Otro de los atractivos de la ciudad es el cerro Pan de Azúcar. Se accede por un camino sinuoso y de exuberante vegetación. Una de las alternativas para subir a la cumbre es una moderna aerosilla, con un recorrido total de 1.090 metros, que asciende por la ladera hasta la cima de 1.260 metros, donde se halla enclavada una gran cruz de acero de 14 metros de alto.