El flamante ministro de Salud, Ginés González García, aseguró ayer que la "prioridad" de su cartera es "reestablecer el sistema de acceso a los medicamentos" y que el Pami, que sería regionalizado, "debe funcionar a pleno". Al deslizar la probable regionalización para "un mejor control" de la obra social de los jubilados y pensionados, también descartó que planee designar un interventor o privatizar esa obra social.
"Sería un mentiroso si dijera que mañana va a volver a funcionar todo", enfatizó el prestigioso sanitarista minutos después de asumir su cargo en Casa de Gobierno. Tras prestar juramento en el Salón Blanco, en una ceremonia encabezada por el presidente Eduardo Duhalde, el nuevo funcionario descartó que piense en la privatización de la obra social de jubilados y pensionados.
En la sala de conferencias de la Casa Rosada, González Ginés insistió: "El presente es duro y en esta emergencia queremos que Pami vuelva a funcionar (y para ello) necesitamos un poco de dinero". En ese sentido, reveló que anteayer se comunicó con el ministro de Economía, Jorge Remes Lenicov, para hablar sobre esta cuestión. Al respecto, recordó que el "sistema se colapsó por la falta de pago. Los proveedores no podían seguir prestando el servicio. El presidente le asignó prioridad a lo social y yo creo que el sistema de salud argentino y el Pami es el sistema social más importante que tiene nuestro país por eso hay que hacerlo funcionar a pleno", remarcó.
González García repitió que la "cuestión de la salud va a tener toda la prioridad que permita, inclusive, la difícil situación económica que tenemos". El flamante ministro dijo que desde su cartera "nos vamos a abocar a tratar de refuncionalizar el sector privado, tanto de las clínicas como de las farmacias".
Críticas a la sectorización
La regionalización de la obras social de los jubilados generó diversas reacciones y expectativa en las entidades relacionados con la institución, que esperan una solución urgente a la crítica situación por la que atraviesan. Algunos confían en que la medida puede tener éxito siempre que se aplique correctamente y se mantenga su carácter solidario, y otros creen que el Pami debe seguir tal cual está.
Carlos Imiscos, secretario de prensa de la Mesa Coordinadora del Pami, expresó que están "absolutamente en desacuerdo con la regionalización porque el Pami ha sido por una gran lucha de años un ente de carácter solidario que se pierde con la sectorización". Imiscos señaló que ya hubo una experiencia previa en Buenos Aires para aplicar el mismo sistema y que fracasó porque no había un directorio nacional que abarcara "el sentido solidario" a nivel nacional.
"La regionalización implica partidas específicas por región que se dan acorde a ingresos de aportes de jubilados y trabajadores y cada provincia recibirá distintas partidas. Somos un país y lo quieren destruir con regiones", dijo Imiscos.
El presidente de la Federación Argentina de Entidades Gerontológicas, Alejandro Barros, dijo que "regionalizar no sirve". Manifestó que quieren que el instituto siga igual "porque es de los jubilados y los que tienen que decidir son ellos".
Por otra parte, José María Lercari, de la Corporación Argentina de Diálisis, dijo que hay prácticas como la nuestra de diálisis en que conviene que esté unificado con un convenio nacional", señaló Lercari. (Télam y DYN)