El escolta bahiense Emanuel Ginóbili fue el abanderado de la legión argentina que triunfa en el exterior y esas brillantes actuaciones se trasladaron al seleccionado nacional, que ha logrado conformar uno de los mejores equipos de la historia.
Sin dudas, está temporada sirvió para que Emanuel Ginóbili se consolide como el mejor jugador argentino y el de mayor proyección internacional, algo que casi seguramente lo llevará a la NBA.
Manu logró algo no habitual en el básquetbol italiano, la triple corona, al ganar la liga italiana, la Copa de Italia y la Euroliga, donde fue elegido el mejor jugador de ese torneo continental y de la serie final.
El juego de Ginóbili crece día a día y hace que su techo sea impredecible, si el bahiense termina está nueva temporada como la ha empezado seguramente al final de la misma tendrá una prueba con los San Antonio Spurs, quienes lo seleccionaron en el draft de 1999.
Pese a que cumplieron su primer año en la NBA, tanto Juan Ignacio Sánchez como Rubén Wolkowyski no pudieron continuar en la liga profesional estadounidense.
Otros argentinos que se destacaron fueron los pivotes del Tau Cerámica español, Fabricio Oberto y Luis Scola, quienes realizaron una excelente temporada y de no haberse topado con un imparable Ginóbili en la final de la Euroliga, casi seguramente hubieran logrado el título.
El salto de calidad mostrado por Andrés Chapu Nocioni en la segunda división (LEB) española con el TDK Manresa y con el seleccionado nacional -especialmente en el Sudamericano y en el Premundial- le permitieron al santafesino llegar al primer equipo del Tau, el dueño de su pase, donde está jugando en gran nivel.
El rafaelino Marcelo Nicola es el jugador argentino que más experiencia tiene en el exterior (10 temporadas), donde siempre rinde.
El base bahiense Alejandro Montecchia sin realizar una gran temporada le alcanzó para cumplir en el Reggio Calabria y en el seleccionado, aunque una lesión lo marginó del Premundial.
Un caso especial es el de Lucas Victoriano, quien no logra encontrar la regularidad para plasmar su enorme talento.
Otros ejemplos de jugadores argentinos que se adaptaron definitivamente al básquet europeo fueron los de Carlos Delfino (Reggio Calabria), Leandro Palladino (Reggio Calabria y Napoli de Italia), Juan Espil (Roma de Italia y Joventud de Badalona de España), Hernán Jasen (brilló en el Gijón y pasó al Estudiantes de Madrid), Silvio Gigena (Scavolini Pesaro de Italia) y Rodrigo Pastore (pasó del Ragusa al Monte Paschi Siena, ambos de Italia).
Mientras que Hugo Sconochini pagó caro precio a su problema de doping y recién hace un mes consiguió equipo: Tau Cerámica, donde por el momento tiene pocos minutos en cancha. (Télam)
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