Nueva Delhi e Islamabad. - Las tropas de India y Pakistán apostadas junto a la línea de control que separa a ambos países en la disputada región de Cachemira intercambiaron en las últimas horas fuego de mortero, en un nuevo incremento de la tensión militar. Al mismo tiempo, la comunidad internacional continuó presionando a los dos gobiernos para que desactiven el despliegue militar que podría concluir en una nueva guerra y mantengan diálogos bilaterales para solucionar la crisis. Desde Texas, el presidente George Bush dijo: "Mi gobierno está trabajando activamente para llevar un poco de calma a la región, con la esperanza de convencer a ambas partes de detener la escalada de fuerza".
Ambos países mantuvieron fuego cruzado en la frontera cachemira en el sector Poonch, informaron autoridades indias. Fuentes militares de Nueva Delhi aseguraron que también se registraron algunos disparos directos con armas de menor calibre, mientras que el gobierno paquistaní no hizo declaraciones sobre los incidentes.
Los civiles huyen
Las poblaciones que viven cerca de los 1.800 kilómetros de frontera que separan a India y Pakistán se aprestan a huir ante un posible conflicto bélico, luego de que ambas naciones dispusieran sanciones económicas y diplomáticas recíprocas y desplegaran tropas y equipamiento militar frente a la línea de control establecida en 1971. Ambos países vedaron el espacio aéreo para el otro, redujeron las representaciones diplomáticas unilateralmente y cortaron las comunicaciones terrestres de ómnibus y ferrocarriles.
La Casa Blanca instó ayer a los jefes de Estado de India y Pakistán a que mantengan un diálogo en Nepal, en la próxima cumbre de países del sudeste asiático, que se realizará en ese país entre el 4 y el 6 enero.
Por el diálogo
Por su parte, el ministerio de Relaciones Exteriores ruso difundió ayer un comunicado del Grupo de los Ocho (G-8) -los siete países más industrializados y Rusia- en el que insta a los mandatarios paquistaní e indio a evitar una escalada en el enfrentamiento, reanudar el diálogo político y "unir sus esfuerzos en la lucha contra la amenaza global del terrorismo".
La declaración reconoce que la actual tensión entre los dos países responde al ataque contra el Parlamento indio el pasado 13 de diciembre, en el que murieron 14 personas y del que India responsabiliza a grupos terroristas con base en Pakistán.
EEUU y el Reino Unido han presionado en los últimos días al gobierno paquistaní de Pervez Musharraf para que actúe contra los grupos fundamentalistas islámicos Lashkar-e-Taiba y Jaish-e-Mohammad, que operan en el sector paquistaní de Cachemira.
Estos países creen que una acción contra los grupos islámicos daría respuesta a los reclamos indios y aliviaría la tensión entre ambos Estados, además de enrolarse en la campaña internacional contra el terrorismo. (Télam)