El titular del Fondo Monetario Internacional (FMI), Horst Köhler, le envió ayer una carta al presidente Adolfo Rodríguez Saá donde le expresó su disposición a trabajar para una "solución sustentable" para la economía argentina, en el primer gesto destinado a tender un puente de negociaciones con el país tras el derrumbe del gobierno de la Alianza.
El jefe de Estado argentino respondió al instante y se comunicó telefónicamente con la número dos del FMI, Anne Krueger, con quien acordó que en enero llegue una misión del organismo al país. En ese diálogo, Rodríguez Saá le pidió al Fondo "comprensión y paciencia".
Por otra parte, se supo ayer que la situación del país será uno de los principales temas de la agenda en la reunión que mantendrán hoy los presidentes de Brasil, Fernando Henrique Cardoso, y su par de Estados Unidos, George W. Bush.
El presidente Rodríguez Saá le prometió ayer al FMI que la Argentina presentará en el futuro un plan económico sustentable, pero le pidió al organismo internacional "comprensión" y "paciencia" dado que su gobierno, antes, debe "solucionar la emergencia social, la marginación, la pobreza, el desempleo y la exclusión social” que “ya no es más soportable” en el país.
Rodríguez Saá reveló que mantuvo un diálogo telefónico con la número dos del fondo, Anne Krueger, con quien acordó que en enero, "vamos a tener una misión del FMI en la Argentina o una misión Argentina en el FMI".
"Hemos recibido una carta del FMI y hemos respondido un llamado telefónico al Fondo Monetario, donde hemos iniciado un diálogo necesario para la Argentina que, después de haber suspendido el pago de la deuda externa, (debe) tener el diálogo necesario para que esto no signifique una ruptura con el mundo, sino un pedido de comprensión hacia el mundo", dijo el presidente.
Rodríguez Saá dijo que se presentará al FMI "un programa económico sustentable en la oportunidad en que estemos en condiciones", para lo cual pidió paciencia al organismo.
El diálogo entre el presidente y Anne Krueger fue el sucedáneo de una carta que el pope del FMI, Horst Köhler, le envió ayer al primer mandatario en la cual le transmitió sus felicitaciones por su designación como presidente de la Nación y expresó su "profunda pena por los trágicos sucesos" ocurridos en el país en los últimos días.
"Yo deseo asegurarle, señor presidente, que el Fondo Monetario Internacional permanece listo para trabajar estrechamente con su gobierno para desarrollar una solución sustentable para los problemas económicos de la Argentina", sostuvo Köhler.
La carta, de sólo dos párrafos, fue interpretada por el gobierno de Rodríguez Saá como una buena señal luego de la decisión de suspender el pago de la deuda pública.
"Este es un comunicado que inicia la apertura del dialogo entre el Fondo Monetario Internacional y la República Argentina", afirmó el secretario general de la Presidencia, Luis Lusquiños, encargado de leer la carta a la prensa.
El funcionario argentino dijo que no hay "absolutamente ningún condicionamiento" para reiniciar las conversaciones y confirmó que se analiza el viaje de una misión de las nuevas autoridades rumbo a Washington.
Lusquiños dijo que dicho viaje se realizará "en el momento que corresponda y que se considere oportuno", aunque aclaró que "no va a ser antes que mediados de enero".
Cuando se le consultó si el legislador peronista por Santa Fe, Oscar Lamberto, sería el interlocutor de este gobierno ante las autoridades del FMI, Lusquiños se limitó a indicar que aún "no se habla de nombres".
Relaciones peligrosas
La última misión del FMI que visitó el país no encontró motivos para anticipar un desembolso de unos 1.200 millones de dólares, habida cuenta del elevado incumplimiento en las metas fiscales.
Rodríguez Saá anunció la suspensión del pago de la deuda externa, una posibilidad que se venía debatiendo desde hacía semanas ante las dificultades del gobierno anterior para cumplir con sus compromisos.
El gobierno necesitaba estos fondos del FMI para hacer frente a los vencimientos del servicio de la deuda de diciembre y los meses posteriores, aunque finalmente pudo cumplir con la primera fecha de compromisos apelando en parte a los depósitos de las administradoras de fondos de jubilación y pensión (AFJP) y renegociando Letras del Tesoro.
Ahora, el FMI deberá analizar un nuevo escenario económico, tras la declaración de la cesación de pagos y la creación de una nueva moneda en Argentina que busca inyectar liquidez e incentivar el consumo para reactivar una economía que no crece desde 1998.
El presidente de Brasil, Fernando Henrique Cardoso, se entrevistará hoy con su par de Estados Unidos, George W. Bush, y en la agenda de la reunión está en los primeros lugares la fuerte crisis que atraviesa la Argentina. Así lo informó el portavoz de Cardoso quien señaló que el presidente Bush el miércoles habló de la Argentina con sus pares de Chile, Uruguay y México