El zaguero y capitán de Racing, Claudio Ubeda, señaló ayer que el pasado "tormentoso" vivido en la entidad de Avellaneda por varios jugadores del plantel, que ahora dirige Reinaldo Carlos Merlo, provoca que estén "más fuertes que nunca", con vistas al partido de esta tarde ante Vélez. "Siempre me acuerdo de los buenos y los malos momentos que se vivieron en este club, y eso hace que estemos más fuertes que nunca para enfrentar este partido", expresó Ubeda. Ubeda llegó a Racing en junio de 1995, cuando el club era manejado por Osvaldo Otero y Daniel Lalín, y el técnico del equipo era Pedro Marchetta. Después de pasar prácticamente tres años sin cobrar, en 1998 Lalín pidió la quiebra del club y en la lista de los acreedores figura (ya reconocido) que Racing le debe a Ubeda 259.050 dólares. Pero esa deuda se incrementó debido a que en los años siguientes no se le pagó siempre la parte de la prima, por lo cual al capitán del equipo de Merlo se le deben a esta altura más de 300.000 dólares. A pesar de eso, antes de empezar el torneo Apertura el zaguero había dicho que su sueño era salir campeón con Racing y posiblemente retirarse jugando en la entidad de Avellaneda. "Obviamente que vivo todo esto con mucha ilusión y ansiedad, pero al mismo tiempo con la tranquilidad de saber que estamos haciendo todo lo correcto para poder sacar el resultado que necesitamos", subrayó. "El sueño del campeonato lo tenemos desde que comenzó el torneo, pero obviamente se fue agrandando a medida de que el equipo se fue consolidando y afianzando hasta llegar a este presente", afirmó. Seguramente la de anoche habrá sido distinta a las demás para los jugadores del equipo de Avellaneda, ya que puede ser "la última luna" de estos 35 años sin Racing campeón. "Siempre se trata de dormir tranquilo. Está claro que este tipo de situaciones no son fáciles de manejar, pero somos muy profesionales y responsables como para poder mantener la tranquilidad", sentenció. Muchos afirmaron que la ansiedad le iba a jugar en contra a Racing en las últimas fechas, pero para Ubeda eso es algo necesario, y remarcó que este plantel "tiene hambre y quiere ganar cosas importantes". "A veces es necesario tener esa ansiedad y esas ganas que demostró tener este plantel para llegar a situaciones como esta, de eso no tengo dudas", indicó. Para Ubeda el partido de hoy ante Vélez será "durísimo" debido a que "todos quieren ganarle al puntero", pero resaltó que "Racing se hará respetar". Falta cada vez menos para que Racing, como todos esperan, salga campeón. Ubeda, por más que todavía prefiera evitar hablar de la historia, sabe que por siempre será recordado como el capitán del equipo que consiguió el título para Racing tras 35 años de frustraciones. (Télam)
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