El mundo hizo foco en los disturbios

Las siguientes son las principales repercusiones en medios internacionales sobre la grave situación económica y social de la Argentina:
The Washington Post (Estados Unidos): Saqueo, alborotos y ola de desmanes en la Argentina. La policía disparó balas de gas lacrimógeno y de goma para dispersar a los saqueadores de almacenes y comercios en la capital y el noreste de la Argentina, este miércoles, en uno de las peores hechos de la última década en cuanto a medidas de austeridad del gobierno y pobreza.
CNN (Estados Unidos): El gobierno argentino declara el estado de sitio, acorralado por centenares de saqueadores y miles de manifestantes clamando por pan.
BBC (Gran Bretaña): Cólera en la Argentina. En Buenos Aires, los manifestantes lanzaron huevos y piedras al presidente Fernando de la Rúa. El malestar social ha sido provocado por una crisis económica que se ha profundizado.
La República (Italia): El precio del milagro económico de Menem. Altísima tensión en el estado sudamericano. Asalto a los negocios en Buenos Aires y en la provincia. Explota la crisis argentina con saqueos a supermercados. La policía dispara proyectiles de goma.
El País (España): De la Rúa decreta el estado de sitio para detener los saqueos. Saqueos y desórdenes en Argentina ante el agravamiento de la crisis. El gobierno atribuye los ataques a los comercios a razones políticas y no a la necesidad.
El Mundo (España): El gobierno argentino decreta el estado de sitio para contener la oleada de saqueos. Un muerto durante los pillajes.
Granma (Cuba): La ferocidad del hambre. El hambre que roe frenéticamente los estómagos argentinos es difícil de comparar con lo que sea. Los retortijones de los intestinos vacíos llevan a la gente hacia los supermercados de abundante comida y (no pueden evitarlo) los asaltan sin pudor.
O Globo (Brasil): Caos en Argentina con ola de saqueos. Una nueva ola de saqueos este miércoles, con centenares de argentinos invadiendo establecimientos comerciales en diversas regiones del país en los peores incidentes en más de diez años, mientras que el gobierno nacional pide calma y promete repartir alimentos en un marco institucional dañado.