La consistencia de Chela. Una final de jerarquía y la promesa de volver el año que viene

Chela venció a Zabaleta en la final del Argentino de tenis

EL tenista de Ciudad Evita derrotó en el encuentro decisivo a Mariano Zabaleta por 6/4, 6/7 (6/8) y 6/2 en 2 horas 17 minutos de juego

Alejandro Cachari

Llegó el final para el Torneo Argentino de Tenis Rosario 2001. Juan Ignacio Chela, el más regular del octogonal, el de mejor exposición tenística y que mayores atributos mostró para adecuarse a la superficie se quedó con el torneo en un gran partido frente a Mariano Zabaleta, que junto con el choque del propio tandilense frente a Guillermo Cañas (1º) se transformaron en lo más atractivo que se vio en la flamante carpeta asfáltica del Jockey.
El Flaco de Ciudad Evita necesitó dos horas y 17 minutos para quedarse con los 19.000 dólares reservados para el ganador del torneo. Chela se impuso por 6/4, 6/7 (6/8) y 6/2 después de dilapidar insólitamente cinco match points consecutivos en el tie break del segundo set, en el que Zabaleta ganó siete puntos consecutivos para extender el desarrollo de la final y ganarse la ovación del público que quería seguir viendo tenis.
El partido arrancó con dos quiebres consecutivos que insinuaron cierta irregularidad. Pero inmediatamente los dos se acomodaron y se hicieron fuertes hasta el final del noveno game, con Chela arriba por 5/4.
Allí Zabaleta tiró por la borda todo lo bueno que había realizado en el primer parcial y lo tiró con dos dobles faltas después de estar 30/15 arriba que le obsequiaron al ganador, con inesperada facilidad, el set inicial. Fue 6/4 en 35 minutos.
Fue de lo mejor que se vio en el torneo. Un set muy dinámico en el que se mataron a palos desde el fondo de la cancha y que cayó para el lado de Chela por la histórica inestabilidad de Zabaleta, que se fue de paseo en el momento menos indicado.
El segundo arrancó con características similares al primero. Zabaleta quebró el servicio de su rival y se puso 2/0 arriba con mucho esfuerzo tras levantar tres break points.
El de Ciudad Evita recuperó el servicio perdido en el sexto game y se encaminaron derechito al tie break. Por entonces el saque de Juan Ignacio ya era mucho más profundo y las dobles faltas de Mariano insinuaban un final de partido en el segundo set. Ni hablar si se piensa que en la muerte súbita el saque es el elemento casi esencial para quedarse con el punto. Menos dudas quedaron cuando Chela quedó con cinco match points a su favor tras tomar una ventaja de 6/1.
Pero la lógica y las tendencias abandonarían el Jockey hasta el final. Zabaleta ganó siete puntos consecutivos para obtener el parcial en un tie break de 8/6. Fue el set más largo del torneo: una hora y seis minutos.
Todo parecía servido para el tandilense. Es que parecía improbable que Chela recuperara el ánimo y la concentración que lo habían transformado en el mejor de los dos hasta entonces. Pero fue al revés. Juan Ignacio recuperó el dominio del juego, volvió a fortalecerse desde su servicio, robusteció sus chances a partir de la desconcentración de Zabaleta y se quedó con el torneo con un 6/2 que le demandó 36 minutos.
En realidad, la sensación, al final claro, fue que los últimos 40 minutos estuvieron de más. Pero el público se quedó chocho con las contingencias del juego y los pocos momentos de desconcierto del ganador que sirvieron para alargar el encuentro decisivo.
Torneo Argentino con final feliz, como se merecían los organizadores, el público y la mayoría de los jugadores que llegaron a esta ciudad para ofrecer su jerarquía. Que se repita.