Un ex de Roque en el equipo

El regreso a la función pública de ex funcionarios del gobierno de Carlos Menem se convirtió en una constante en la actual gestión de Fernando de la Rúa. Ahora, le tocó el turno a Miguel Kiguel, quien fue designado como jefe de asesores del Ministerio de Economía.
Presidente del Banco Hipotecario, Kiguel se desempeñó como subsecretario de Financiamiento de Roque Fernández, el ex ministro de Economía durante el segundo mandato presidencial de Carlos Menem.
Su designación en esta nueva etapa coincidió con la noticia del alejamiento del hasta ayer secretario de Finanzas y principal negociador de la deuda, Daniel Marx. El funcionario, que ayer participó de la conferencia de prensa que ofreció el ministro Cavallo, fue reemplazado por Guillermo Mondino, quien además retendrá su actual cargo de secretario de Política Económica.
"Guillermo Mondino se hará cargo de las dos funciones ya que es un hombre joven que estoy seguro puede desempeñar una muy buena tarea", explicó el ministro.
Ante una pregunta de la prensa, el flamante jefe de gabinete de asesores de Economía, Kiguel, reconoció haber criticado públicamente algunas políticas del equipo económico en los últimos tiempos. Pero, de inmediato, aclaró: "Entiendo que se están tratando de superar todos los escollos".
En su primera declaración pública como miembro del equipo económico, Kiguel señaló que su ex jefe, Roque Fernández, estuvo de acuerdo con que aceptara el nuevo cargo.
Cavallo aseguró que está "muy contento" que Kiguel se sume a su equipo de colaboradores y recordó que durante su anterior gestión al frente del Palacio de Hacienda le había recriminado a Fernández, por entonces presidente del Banco Central, que no utilizara a un "joven brillante como Kiguel" en el organismo monetario.
"Kiguel es un brillante economista y como siempre digo quien asume en estos momentos la determinación de colaborar con el país es un patriota", completó Cavallo en la conferencia de prensa.
Kiguel, en un seminario para banqueros realizado el martes último, dijo que "desde el punto de vista bancario es mucho más fácil dolarizar, ya que es una forma más ordenada de salir" de la crisis.
Respecto de la flotación del tipo de cambio afirmó en esa oportunidad que "es difícil de controlar, y no hay gimnasia en el Banco Central" para comandar esa alternativa, en tanto que se mostró contrario a una eventual devaluación.