El aporte anual por emergencia de los pasivos provinciales ronda los 24 millones de pesos, mientras que los activos suman otros 28 millones, para sumar un ahorro total de 52 millones y Bondesío. Aunque los gremialistas sostienen que el déficit de la Caja debe aludir exclusivamente al que genera sostener a los empleados públicos, y dejar al margen a regímenes especiales como el de la Policía, Bondesío dijo ayer que no es posible deslindar ambos rubros, porque todos están en la Caja y ésta tiene que afrontarlos. De ese modo, el déficit suma en total 120 millones, de los cuales sólo 45 millones corresponden a los regímenes especiales. Gracias a los 52 millones de la emergencia, el rojo queda reducido a 68 millones. Además del déficit propio del sistema de los empleados públicos, abarcados por la ley 6915, hay otros 44 millones extras que el ente debe afrontar. Entre ellos se destacan 3,1 millones en jubilaciones de privilegio y pensiones graciables, 3,9 millones en asignaciones familiares, 3,7 millones en deudas que se pagan con bonos y una serie de adicionales salariales otorgados a los trabajadores en diferentes épocas, como sumas fijas o bajo otras fórmulas.
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La Ciudad
