La Alianza, con el respaldo de sus antiguos aliados del Frepaso, ARI y Frente para el Cambio, consiguió en la Cámara de Diputados aprobar anoche el proyecto que aumenta en 10 puntos la alícuota del impuesto a las ganancias para las personas que tengan ingresos superiores a un millón de pesos y las empresas con dividendos mayores a cinco millones. La iniciativa deberá ser tratada ahora por el Senado.
Por otro lado, la Cámara baja también dio media sanción a una iniciativa para suspender las ejecuciones judiciales a empresas en crisis (ver aparte).
El proyecto de aumento del impuesto a las ganancias fue aprobado por 100 votos a favor sobre 70 en contra y 2 abstenciones. El justicialismo había pedido que volviera a comisión pero fracasó en la votación. Si bien el principal partido de la oposición no avaló la propuesta, evitó llevar al recinto un número suficiente de legisladores como para hacer peligrar la votación. La incógnita se traslada ahora a la Cámara alta, donde el peronismo tiene amplia mayoría. Fuentes parlamentarias señalaron que el aumento impositivo tiene posibilidades de ser aprobado en esa instancia en caso de que se convierta en coparticipable.
El incremento del impuesto, que pasará del actual 35 al 45% por única vez (aunque deja abierta la posibilidad de prorrogarlo por dos años), busca absorber fondos para equilibrar el déficit fiscal y recaudar unos 1.056 millones de pesos.
El denominado "impuesto de emergencia a las ganancias" logró, por primera vez desde que comenzaron las discrepancias en la Alianza, que los diputados que conformaron la coalición original volvieran a coincidir en la sanción de un proyecto de ley.
El bloque del justicialismo no acompañó la propuesta del oficialismo parlamentario -el gobierno no respalda el proyecto-, ni tampoco lo hicieron los provinciales que propusieron el paso a comisión para realizar un análisis más exhaustivo.
La bancada oficialista decidió ayer insistir con el dictamen original de la comisión de presupuesto. En caso de prosperar en el Senado este proyecto, más de 200 personas físicas y alrededor de 260 empresas deberán pagar una alícuota del 45 por ciento el próximo año y el siguiente, y no podrán descargar este aumento a cuenta de otros impuestos.
Para otra ocasión, quedó un proyecto de Beatriz Nofal que establecía un aumento de cinco puntos en forma gradual desde las ganancias superiores a 300 mil pesos hasta un millón de pesos.
El debate del proyecto para aumentar ganancias se abrió en la segunda jornada maratónica de una sesión especial al filo del período ordinario, tras aprobar con cambios el proyecto para limitar los intereses que retienen los bancos a los provincias por las deudas que mantienen con estas instituciones.
El fuego fue abierto por el presidente del bloque de la Alianza, Darío Alessandro, quien defendió el proyecto con el argumento de las necesidades fiscales que existían en la Argentina en este marco de crisis que obligó a aplicar medidas para reducir el déficit fiscal.
El jefe de los legisladores aliancistas aseguró que el incremento "sólo afectará a un club muy selecto de unas 500 empresas y personas con el mayor nivel de ganancias".
En tanto, el diputado peronista Oscar Lamberto dijo que "apelar a medidas espasmódicas para tranquilizar conciencias es absolutamente irresponsable".
La presidenta de ARI, Elisa Carrió, dijo que "por principios estoy de acuerdo con el proyecto y lo vamos a votar", pero "ya es tarde por más que se aumente un punto. Lo que hay que cambiar son las relaciones económicas, políticas y sociales".
División interna
El secretario de Ingresos Públicos, José María Farré, había expresado su apoyo y precisó que existen 280 grandes empresas en condiciones de ser alcanzadas por el aumento de ganancias, lo que permitiría sumar 1.000 millones de pesos a la recaudación, y 250 personas, que reportarían unos 56 millones más. Pero si bien la propuesta contó con el apoyo del Ministerio de Economía, el jefe de Gabinete, Chrystian Colombo, lo rechazó .