Buenos Aires.- Un delincuente murió ayer, otro resultó herido y dos cómplices escaparon después de tirotearse con policías que los sorprendieron cuando intentaron asaltar la tesorería del Hospital Español, en el barrio porteño de Balvanera, donde se pagaban sueldos quincenales a empleados. La policía informó que en el enfrentamiento ocurrido después de las 6.30 en el hall de entrada y en la puerta de acceso al hospital, una enfermera, Adela Benítez, de 42 años, sufrió dos heridas por el roce de balas, pero que está tarde se encontraba fuera de peligro. Todo comenzó ayer cuando los cuatro ladrones ingresaron al hospital, ubicado en La Rioja y Belgrano, del barrio porteño de Balvanera, a bordo de un Volkswagen Golf y, por los menos tres de ellos irrumpieron armados en el hall de entrada. "Los hombres se mezclaron con los empleados que llegaban en el cambio de turno, es decir cuando finalizan su jornada quienes cumplen horario nocturno", contó una enfermera, testigo del hecho. Sin embargo, un custodio privado del hospital sospechó de los delincuentes porque conoce "de memoria" a los trabajadores y, rápidamente, alertó sobre un posible intento de robo a la comisaría 8ª, relató la enfermera. Mientras eso ocurría, dos de los criminales inmovilizaron a una mujer de la vigilancia privada y le apuntaron con su arma a la cabeza. En ese momento y en circunstancias poco claras, otro custodio enfrentó a los ladrones y se produjo un tiroteo en el hall central del Hospital, a unos 30 metros de donde funciona la tesorería. Los delincuentes abortaron el plan e intentaron escapar por la puerta de entrada pero allí ya los esperaban varios móviles de la comisaría 8ª Se produjo un segundo tiroteo en el que cayó muerto uno de los asaltantes, otro resultó herido de seis balazos y detenido, en tanto que el resto de la banda -serían dos- escapó. En poder de los ladrones la policía secuestró dos pistolas 11.25. Poco después, la comisaría pidió colaboración al grupo táctico GEOF, por la sospecha de que los prófugos se encontraban todavía en el interior del hospital, camuflados entre empleados y pacientes. Agentes de ese cuerpo especial se apostaron en las calles que rodean al hospital y otro grupo revisó minuciosamente cada sala y pasillo del centro asistencial, con la intención de detectar a los prófugos. No obstante, testigos dijeron a la policía haber observado a un hombre sospechoso salir a la calle por una puerta trasera del hospital y tomar un taxi. La teoría más fuerte de los investigadores apunta a que hubo un entregador, que facilitó el accionar de la banda con información precisa sobre los movimientos de empleados, médicos y vigiladores. "El pago de haberes no tiene un día fijo en el mes, siempre nos enteramos sobre la fecha porque, por una cuestión de seguridad, el dato es mantenido en secreto", confió un empleado administrativo del hospital, lo que reforzó la teoría del "entregador". El empleado, que se excusó de identificarse, protestó también por el "peligro" que supone cobrar el sueldo en efectivo en el lugar de trabajo y advirtió que los haberes deberían depositarse en cajas de ahorro y cobrarse a través de cajeros automáticos. El asaltante herido fue trasladado de urgencia al hospital Ramos Mejía. Sufrió seis heridas de bala, por lo que fue operado esta tarde y permanecía internado en grave estado. Por otra parte, un policía que en una de las corridas cayó y sufrió una luxación de tobillo, fue trasladado al hospital Churruca. Fuentes del hospital comentaron que la irrupción de los agentes del GEOF provocó serios inconvenientes en la actividad sanitaria, ya que para ayer estaban previstas tres cirugías urgentes, que debieron posponerse. (Télam)
| La policía repelió a balazos el intento de robo en el hospital. | | Ampliar Foto | | |
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