Berlín. - Líderes de grupos políticos y étnicos de Afganistán coincidirán el lunes próximo en Berlín, en medio de estrictas medidas de seguridad, para las negociaciones que conduzcan a forjar un gobierno interino en el devastado país de Asia Central. Representantes de la Alianza del Norte, partidarios del ex rey Zahir Shah, exiliados en Irán y refugiados radicados en Pakistán, todos están invitados a la cita patrocinada por las Naciones Unidas, cuya realización en Berlín refleja un siglo de fuertes vínculos entre Alemania y Afganistán.
El ministro del Interior de la Alianza del Norte, Yunus Qanuni, encabezará el equipo de esa organización, mientras un asesor del antiguo monarca enviará una delegación que podría incluir una mujer, marcando una diferencia con el régimen talibán, que las obligó a recluirse en sus hogares. También se espera que asistan diplomáticos de Estados Unidos, Gran Bretaña, Pakistán y Rusia. Por Washington estará su enviado para Afganistán, James Dobbins, mientras Moscú despachará a Zamir Kabulov, un funcionario con experiencia en el país asiático.
Alemania espera deleitarse en su papel de anfitriona de una importante conferencia, mientras busca aumentar su papel en la política internacional. Por ahora, la tarea de Berlín es resolver la logística para la reunión, que se realizará a puertas cerradas y en medio de la más estricta seguridad.
Sin límite de tiempo
"Hay varias opciones que se barajan para la cumbre. Pero todavía no ha sido tomada una decisión", señaló la portavoz de Asuntos Exteriores alemana, Sabine Sparwasser. La funcionaria agregó que no habrá límite de tiempo para las conversaciones de modo de garantizar el éxito de las mismas. "No hemos fijado fecha de conclusión del encuentro. No queremos especular sobre cuánto tiempo durará", dijo.
Sparwasser destacó que la conferencia no tendrá un carácter meramente simbólico. "El objetivo es, en verdad, la creación de un gobierno de transición en Afganistán", declaró. La reunión ha sido convocada por las Naciones Unidas. El gobierno de Alemania se ha ofrecido a poner a disposición las instalaciones para el encuentro y brindar apoyo técnico.
Fuera de Asia y Estados Unidos, Alemania es el país europeo que tiene una de las mayores comunidades afganas, con entre 70.000 y 100.000 estudiantes y exiliados. En Berlín fue puesto ayer en marcha un operativo de máxima seguridad. La policía se dedicó a sellar los sumideros en las calles para prevenir la colocación de bombas mientras que perros adiestrados rastreaban en búsqueda de explosivos, se informó oficialmente. "Osama Bin Laden podría hacer estallar por los aires a todos aquellos que quieran la paz en Afganistán", expresó sobre el despliegue de fuerzas policiales el dirigente del sindicato policial berlinés Eberhard Schoenberg, en declaraciones que difundió ayer el diario Berliner Kurier.
La única facción que no ha sido invitada por la ONU es la de los talibanes, que también forma parte de la etnia pashtún. Tanto el ex presidente afgano, Burhanuddin Rabbani -quien es considerado como el político más influyente en estos momentos en Kabul-, como el enviado de la ONU Ibrahim Brahimi han destacado que las conversaciones de Berlín serán sólo el comienzo de un largo proceso. (DPA y Ansa)