Los escurrimientos, otro problema

El titular de Suelos del Inta explicó que "el principio es tratar de retener el agua donde cae, no permitir que el agua escurra. Por ejemplo en el caso de La Picasa los escurrimientos que provienen de áreas aledañas o de Córdoba. El agua que no se retiene donde cae genera o incrementa el problema. Lógico que con sólo retener no se soluciona el tema también hay que conducir los excedentes con obras hidráulicas, de bombeo, de derivación, que son válidas, pero lo que no hay que descuidar en el futuro es la solución agronómica".
"Con obras hidráulicas solamente el problema no se resuelve. Cuando decimos que se debe retener el agua donde cae, nos referimos por ejemplo a la siembra directa que se está difundiendo mucho en el sur de la provincia de Santa Fe. Es una tecnología que contribuye mucho a tratar de retener líquidos en el lugar donde cae. La siembra directa tiene la capacidad de infiltrar en el suelo grandes volúmenes de agua de lluvia por lo que puede ser una contribución importante dentro de las tecnologías planteadas", aconsejó el especialista.