El vicepresidente estadounidense, Dick Cheney, aseguró ayer que Estados Unidos estaba preparado para continuar con su guerra contra la red Al Qaeda de Osama Bin Laden fuera de las fronteras afganas. En una entrevista con la cadena inglesa BBC, Cheney dijo que las células de la organización terrorista, considerada por Estados Unidos como principales sospechosas de organizar los atentados del 11 de septiembre, operaban en unos 50 países. "Estamos trabajando con los servicios de otros países y otros gobiernos para tratar de atrapar a esas organizaciones", dijo Cheney desde Washington. "Cuando sea adecuado, estaremos preparados para emplear la fuerza militar si es necesario a fin de cerrar estas operaciones (...) estoy seguro que la campaña futura será larga, pero al final, creo que tendrá éxito", agregó.
Tras los avances de la Alianza del Norte contra el Talibán, Cheney dijo que Estados Unidos continuaría involucrado para ayudar a reconstruir a Afganistán. "Aclaramos que no tenemos interés alguno en abandonar al país. Queremos estar activamente involucrados con el pueblo afgano para crear un ambiente que sea saludable para ellos y también asegurar que Afganistán nunca se vuelva a convertir en la base de operaciones terroristas contra el mundo exterior", sintetizó.
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La Ciudad
