En una ruidosa caravana de vehículos que recorrió el centro de Buenos Aires, medio millar de pobladores de las zonas inundadas de la provincia de Buenos Aires llegó ayer a esa ciudad para reclamar ayuda al gobierno. En tanto, las lluvias continuaban agravando la situación en la región anegada y amenazaba a nuevos cascos urbanos. Con la marcha en pleno desarrollo, el gobierno resolvió suspender las ejecuciones por parte del Banco de la Nación y de la Afip a los productores afectados por las inundaciones y prometió prorrogar por 180 días el decreto que declara zona de desastre a los municipios que quedaron bajo el agua, que vencía a fin de mes. Un grupo de 16 personas ingresó al mediodía a la Casa de Gobierno para entregar un petitorio con una lista de ayudas urgentes que necesitan los productores y comerciantes de las zonas inundadas. Los dirigentes empresariales y del campo fueron recibidos por el secretario privado del presidente, Leonardo Aiello, quien les comunicó que en 15 días serían recibidos por el jefe de Estado, Fernando De la Rúa. También conversaron con el ministro del Interior, Ramón Mestre, y el secretario de Provincias, René Bonetto. Los dirigentes entregaron un petitorio que lleva las firmas del titular de la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (Carbap), Dardo Chiesa; el de Federación Agraria, Eduardo Buzzi; el de Asociación de Industriales bonaerenses, Julio Massara; el vicepresidente 1º de la Federación Económica de la provincia de Buenos Aires, Raúl Lamacchia; el presidente de Came, Osvaldo Cornide, y el secretario del Nucleamiento Empresarial del noroeste bonaerense, Luis Levy. Al término de las deliberaciones, Bonetto anunció que el Banco Nación y la Afip suspenderán las intimaciones y ejecuciones para los deudores de dichas zonas en desastre y también ratificó que serán eximidos de todos los impuestos nacionales y de contribuciones previsionales. Condonación de deudas, suspensión de ejecuciones, la creación de un fondo fiduciario, exención de impuestos nacionales al agro, comercio e industria fueron los pedidos que formularon los manifestantes en el documento entregado en la Casa Rosada. Dirigentes de la protesta dijeron que los reclamos son conocidos por De la Rúa, quien los recibió en mano el pasado 23 de octubre cuando visitó Carlos Casares, una de las regiones más afectadas. El avance de las aguas ya perjudica a cuatro millones de hectáreas en la provincia de Buenos Aires. Los manifestantes llegaron a la Plaza de Mayo en algo más de cien vehículos, entre autos, camionetas y camiones, que debieron estacionar sobre la avenida de Mayo en razón del vallado que dispuso la Policía Federal y que impidió el acceso a las inmediaciones de la Casa Rosada. Los productores bonaerenses llegaron desde distritos como Daireaux, General Alvear, General Belgrano, Ameghino, Bolívar, Pehuajó, 9 de Julio, Carlos Casares, Henderson, entre otros partidos. (DyN)
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