La ratificación del gobierno de que dará curso a la reestructuración voluntaria de la deuda y un acercamiento de la Nación con los gobernadores para discutir las transferencias de los fondos de coparticipación revirtieron la tendencia negativa que se había instalado desde hace una semana en la Bolsa porteña. Así, el Merval cerró con una suba del 1,84%, pese a que el riesgo país se disparó nuevamente y tocó el límite de los 2.032 puntos básicos, 29 puntos más que anteayer.
Ni bien se iniciaron las operaciones, la cotización de las acciones y los títulos de la deuda se desplomaron, lo que motorizó una ola de ventas que elevó el índice de riesgo país a niveles récord.
Por esas horas los bonos más representativos de la deuda, como global 2008 y el que vence en el 2017, caían en promedio el 4 %, y el fantasma del desplome del 8 % del lunes estaba latente.
Sin embargo, con el correr de la tarde, una vez que se reanudaron operaciones en el recinto -que tuvo que ser evacuado al mediodía por una amenaza de bomba-, esta tendencia se revirtió.
Por otro lado, en la bolsa porteña los negocios sumaron 12,74 millones de pesos y el balance determinó finalmente 15 alzas, 17 bajas y otras 6 firmas que conservaron sus registros anteriores.
Entre gran cantidad de especulaciones, fueron los grandes fondos los encargados de tomar la senda compradora, impulsados por la versión según la cual las negociaciones entre los gobernadores del PJ de las provincias denominadas grandes están "bien encaminadas".
El tesorero del Mercado de Valores de Buenos Aires (Merval), Pablo Aldazabal, destacó que "si el acuerdo con las provincias se logra, el gobierno obtendría un margen político para la reestructuración de la deuda y lograr el déficit cero en el último trimestre, lo que destrabaría los desembolsos del FMI y las garantías de otros organismos multilaterales, claves para que el canje sea viable".
Otro de los puntos esgrimidos ayer por los operadores para explicar el repunte del Merval fue la confirmación oficial, de boca del presidente, Fernando de la Rúa, de que la reprogramación de la deuda que está en estudio "será voluntaria" y negó que se pueda ser "forzada o coercitiva", tal como habían interpretado ayer algunos operadores.
En medio de un complicado panorama en los mercados, las tasas de interés en el circuito mayorista de dinero se empinaron al 45 %anual y a los grandes inversores se los tentó con tasas del orden del 35 % para los depósitos a plazo fijo.
Pese a la turbulencia en los mercados y a la suba del riesgo país, la operatoria en los bancos fue normal y no se registraron retiros de depósitos de magnitud, aunque ayer no había vencimientos por volúmenes de importancia.
En el Banco Nación, "hubo algunos retiros pero nada imposible de controlar", dijo el director de prensa de la institución, Guillermo Saldomando.
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La Ciudad
