Con oficio y con un golazo de Ariel Ortega que abrió los caminos del triunfo, River le ganó a Belgrano 2 a 0 y sigue a la expectativa para pelearle palmo a palmo el título a Racing, aunque con esta victoria no haya podido acortar la diferencia de cinco puntos que lo separa de los dirigidos por Mostaza Merlo.
La victoria de los dirigidos por Ramón Díaz recién se encaminó a los 34 minutos del primer tiempo, cuando el Burrito envió un centro-gol que se coló en el ángulo superior del arquero Olave. Mientras que en el segundo período, cuando no había pasado demasiados sobresaltos y regulaba el ritmo a volundad, Martín Cardetti estiró las cifras y le dio forma a un resultado que le permite seguir a tiro de la punta del Apertura.
Si bien el primer tiempo se caracterizó por la velocidad que aportaron ambos equipos, los de Ñúñez se mostraron más convicentes por el simple argumento de poseer individualidades con mayor jerarquía.
A pesar de esa diferencia, Belgrano tomó la iniciativa y buscó rápidamente ponerse en ventaja, basándose en la asociación de Matías Arce, Gabriel Meta y Felipe Desagastizábal. Pero las dificultades de Belgrano estuvieron en la definición y entonces empezó a entrar en escena el tándem integrado por D'Alessandro y Ortega. Cuando ellos tomaban contacto con la pelota, River se encendía y generaba las mejores opciones de riesgo en el arco pirata.
A excepción del mencionado tanto de Ortega casi no hubo situaciones de de peligro en la primera etapa. A los 21', el paraguayo Rojas escapó por izquierda y metió un disparo bajo que Olave controló con esfuerzo.
El complemento
En la segunda etapa, el local estuvo cerca de empatar, pero el bombazo de Mauro Obolo rebotó en la parte superior del poste izquierdo. Pero en líneas generales ese episodio careció de la velocidad que mostró el primero tiempo, porque River se replegó con la intención de definir de contraataque. Belgrano insistió en procura de la igualdad, pero las pocas veces en que llegó el límite se lo puso Angel Comizzo, quien exhibió notables reflejos y dio muestras de estar permanentemente concentrado en el juego.
Así trascurrió el partido hasta el final. Con un River agazapado para meter el tercero que nunca llegó y Belgrano ya casi sin fuerzas para dar pelea hasta el final.
Con este triunfo quedó comprobado que los dirigios por Ramón Díaz sustentan el plus de la categoría individual de sus hombres y con eso parece alcanzarle para seguir a la caza de Racing en la lucha por el título. (DyN y Télam)