Año CXXXIV
 Nº 49.278
Rosario,
martes  23 de
octubre de 2001
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El asesinato de Gerónima Gallardo
Sobreseimiento para el imputado de un crimen
Juan Vicente Moncada fue desvinculado del homicidio ante la inexistencia de pruebas en su contra

Un hombre que estuvo imputado en el homicidio de Gerónima Gallardo, la mujer que fue asesinada el 3 de febrero de 1999 en el barrio 7 de Septiembre, fue sobreseído por el juez de Instrucción Jorge Eldo Juárez ante la inexistencia de pruebas que lo vincularan con el hecho. El caso cobró relevancia cuando el magistrado lo vinculó con el crimen de Mariano Díaz, el chico de 14 años que dos semanas más tarde apareció asesinado en un descampado de la zona.
Gerónima Catalina Gallardo vivía en el barrio 7 de Septiembre, donde la conocían por su sobrenombre, Tity. La mujer, de 40 años, atendía un quiosco ubicado en el frente de su vivienda y allí fue asesinada a sangre fría la medianoche del 3 de febrero de 1999. Volvía a su casa junto a una amiga cuando la interceptaron cinco hombres, en Colombres 978 bis. La víctima intentó ponerse a salvo detrás de una puerta, pero los atacantes ingresaron al local y la balearon en el corazón.
Desde un comienzo, el crimen fue investigado como un ajuste de cuentas vinculado con el tráfico de drogas. La hipótesis tenía sustento en un antecedente penal de la mujer, que era investigada por presunta comercialización de estupefacientes en el barrio.
Luego el asesinato quedó vinculado a otro resonante crimen ocurrido en el barrio: el de Mariano Díaz, el chico al que asfixiaron y luego le realizaron un disparo en la cabeza el 19 de febrero de 1999. Los familiares del adolescentes aseguraron que lo mataron porque presenció en forma circunstancial el crimen de Gallardo, y consideran que fue asesinado para que no reconociera a los autores del homicidio de la mujer. Por eso el juez Juárez vinculó ambos casos, que pese a una extensa investigación, aún no fueron esclarecidos.
Moncada, un albañil de 36 años que no posee antecedentes penales, fue involucrado con el asesinato luego de que un testigo lo reconociera en un álbum fotográfico policial. Luego el testigo no pudo identificarlo durante la rueda de reconocimiento judicial.
Ante el pedido de su abogado defensor, Carlos Racamato, Moncada recuperó la libertad el 24 de febrero del año pasado al ser beneficiado por la falta de mérito, figura por la cual continuaba vinculado a la causa. Ante la inexistencia de pruebas que lo vincularan con el homicidio, Moncada obtuvo el sobreseimiento, que lo deja fuera de la investigación.


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