El empresario rosarino Roberto Villavicencio cree que en la ciudad de Rosario hay dos sistemas de salud "superpuestos". Al grupo de hospitales municipales con sus respectivos efectores de salud periféricos en los barrios hay que sumarle los hospitales provinciales con una red similar. "En vez de complementarse, compiten", apuntó. Y lo mismo dijo de los privados. "No es que la competencia sea mala. El Estado debe normatizar para que se complementen los servicios y provocar una competencia sana y regulada, destinada a mejorar el estándar de calidad", definió. Aunque en orden de prioridades se inclinó para que primero "se garantice que la medicina sea igual para todos, mediante un acceso razonable y disponible; por ejemplo, la gente no puede hacer cola para que la atiendan. Recién después viene la competencia", remató el empresario.
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