River no se rinde. El equipo de Ramón Díaz goleó 3 a 0 a Universidad de Chile y mantiene las expectativas para seguir en la Copa Mercosur, en un encuentro correspondiente a la última fecha del grupo E del torneo continental.
Con este resultado, los millonarios se aseguraron la segunda posición de la llave -detrás de Gremio, que ayer igualó sin goles antes Palmeiras y lo eliminó del torneo-, aunque todavía no puede cantar la clasificación hacia la segunda fase como uno de los tres mejores segundos de la fase inicial, porque debe esperar que se le den un par de resultados en los partidos de hoy y mañana.
Lo cierto es que si River quiere seguir con vida en el torneo sudamericano se deben dar una serie de combinaciones en los partidos de los demás grupos y así acceder como uno de los mejores escoltas.
Por lo pronto, Independiente y Colo Colo -ambos segundos en el grupo C, con 6 puntos- deberían empatar entre sí, mientras que Vélez Sarsfield y Peñarol tendrían que vencer por exigua diferencia a San Pablo y Talleres de Córdoba, respectivamente.
Si estos marcadores le otorgan un guiño favorable, entonces sí el equipo dirigido por Ramón Díaz podrá clasificar para la segunda fase.
River cumplió
En lo que respecta al partido de ayer ante Universidad de Chile, River cumplió con lo suyo. En un encuentro sin equivalencias, los millonarios manejaron a gusto la contienda ante los chilenos y lograron sacar una diferencia de tres goles. Los tantos fueron convertidos por Yepes, en dos ocasiones, y Damián Alvarez en el último minuto del complemento.
Si bien la victoria se consolidó en la segunda parte, cuando Yepes llegó para empujar la pelota casi en la misma boca del arco y rematar a la red lo que no pudo hacer su compañero Ortega, el pleito estaba resuelto bastante tiempo antes.
Después del 2 a 0, el poco ritmo que tenía el juego se cayó definitivamente. Porque River se conformó con mantener la diferencia -que pudo haber aumentado antes, a través de Ortega, Ricardo Rojas o el ingresado Víctor Zapata- y porque los conducidos por César Vaccia no exhibieron la suficiente profundidad para inquietar a Angel David Comizzo.
Tan sólo un grosero error podía garantizar que se alterara el resultado. Y el arquero Herrera se equivocó feo en una salida, sobre los 44' -quiso habilitar a su compañero Waldo Ponce y dejó corta la entrega-, que el ingresado Damián Alvarez puso las cifras definitivas.
Lo que siguió después fueron sólo alternativas en el arco chileno que la impericia de los delanteros del equipo de Ramón Díaz no permitió que el resultado fuera mayor.
River Plate cumplió con su cometido. Ganó y ahora deberá confiar en otros equipos para acceder como uno de los mejores segundos de todos los grupos a la segunda fase de la Copa Mercosur. (Télam)
La Ciudad
