Con los primeros calores de la primavera, uno se aliviana de ropas y ahí está el espejo ofreciéndole la más cruel de las imágenes. Rollos en la panza, cola aún más caída que durante el verano pasado, brazos fofos y una cintura que obliga sin piedad a agregar agujeros en el cinturón. Entonces, la decisión que no se tomó en todo el año se hace inexorable antes de que llegue el verano: hay que ir a un gimnasio (por unos 20 a 35 pesos mensuales) o llamar a un personal trainer con carácter de urgencia (lujo que va de los 60 a 100 pesos mensuales). La Capital incursionó por algunos gimnasios. En todos sostienen que desde hace un mes las matrículas se duplicaron y aseguran que en los dos meses que quedan por delante se puede hacer bastante para mejorar el cuerpo. No obstante, aclararon que siempre es mejor calzarse el jogging y las zapatillas durante todo el año y sistemáticamente.
Para quienes encarar el fitness es un problema de tiempo y voluntad, se incluyen en esta nota algunos ejercicios para practicar entrecasa (ver aparte). Los recomienda Patricia Sangenis, la deportóloga de Valeria Mazza y de Germán Burgos (arquero de la selección), en su libro "Mi método. Para estar en forma definitivamente".
El primer inconveniente al entrar en un gimnasio es descifrar de qué se trata el menú de ejercicios que se ofrecen: localizada (músculo por músculo), body sculpting y aeróbica (con escenografía y música); taebo y aerobox (combinación de artes marciales y boxeo); aerolatino (con salsa y merengue); spinning (sobre bicicletas fijas); aerobar (gimnasia con barras y pesos); full contact (en contacto con objetos y personas) y stretching team (elongación), son algunas de las opciones.
El segundo inconveniente se vive cuando se tiene la pretensión de lograr, en pocos días, los músculos y siluetas de los profesores del gimnasio. "Todos quieren llegar «lindos» al verano. Nosotros les decimos que es importante llegar lindos, pero también saludables", sostiene Diego Sebben, coordinador de Belgrano Centro (Belgrano al 600) el gimnasio que depende de la Dirección de Deportes de la Municipalidad de Rosario y que cobra sólo una cuota mensual de 5 pesos.
Para Adriana Bertrán, del Estudio Gabriela Morales (Presidente Roca 417), "un buen cuerpo es el que logra tonicidad muscular, alineamiento del esqueleto, buena respiración y que encuentra placer en el movimiento". En este instituto no hay aparatos ni música a ritmo de marcha. Imperan las cañas, las pelotas de goma espuma y la música relajada; se trabaja con ropa cómoda y en patas. "Para estar bien -agrega Bertrán- no hay vueltas: hay que tomar y soltar el aire por la nariz y aprender a pararse, caminar, sentarse y correr con la cabeza arriba del tórax, el tórax arriba de la pelvis y la pelvis arriba de los pies".
Desde The Planet (Salta e Italia), Cecilia, instructora de spinning, asegura que "combinando una actividad aeróbica (gimnasia, carrera, bicicleta, natación) y una localizada (trabajo de cada músculo), durante 45 días y tres veces por semana, se pueden lograr resultados satisfactorios". No obstante subraya: "Hay que cerrar la boca. No vale de nada comenzar a «matarse» en el gimnasio si al mismo ritmo se come sin parar".
Personal trainer y profesor en Megathlon (Pellegrini 614), Esteban Ponce, dice que los pedidos por una rutina personal de actividades aumentaron un 50 por ciento desde que comenzó septiembre. ¿Qué piden últimamente las mujeres? Ponce los responde: "Pasar la prueba del saludo: poder mover firmemente un brazo en alto". ¿Y los varones? "Curiosamente, comenzaron a interesarse por tener mejor cola".
| 
Body sculpting, una manera de quemar grasas rápido. |  | Ampliar Foto |  | |
|
|
La Ciudad
