El culto de la imagen impone que los artistas extremen los cuidados que les prodigan a sus físicos. Más allá de los límites que marca la sensatez, las figuras que se exponen en la pantalla chica o frente a las cámaras fotográficas de los medios de comunicación suelen ser implacables consigo mismas. Laura Miller no es la excepción a la regla aunque justifica los afanes que le permiten mostrar una buena imagen: "Te digo cuál es mi personalidad como mujer -confía-. Yo soy de cuidarme mucho y me gusta verme bien, ir al gimnasio y mantener un buen estado físico. Eso sólo por el hecho de ser mujer y de ser coqueta. Obviamente que al estar expuesta públicamente, las exigencias son mayores a las que puede tener una amiga mía por ejemplo -aclara-. Hoy por hoy se impone una imagen determinada y uno tiene que ajustarse a eso lo más posible. Pero tampoco me vuelvo loca, ¿eh? No hago dietas locas ni tomo cosas raras, sino que trato de cuidarme lo más posible, sobre todo porque los shows requieren de un entrenamiento muy fuerte para poder hacerlos y llegar entera al final. Yo bailo y canto y bueno tengo un despliegue físico importante. Hay que estar preparada", explica. Junto a las voces que claman por mayores espacios y oportunidades para las mujeres, también se escuchan los susurros de quienes ensalzan la dedicación a la gimnasia, el seguimiento de dietas alimentarias especiales y miles de sacrificios a los que se someten los artistas casi sin chistar. La imposición a las mujeres mediáticas de aparecer como permanentes seductora no parece disgustarle a Laura Miller. La artista no considera la situación como una concesión que está obligada a realizar: "Si dijera que no me agrada gustar a la gente mentiría -admite-. No podría ser tan hipócrita: me encanta. Si dicen: «Qué linda que es» o «Me gusta su cuerpo», mejor. Mientras más cosas digan es para mejor y bienvenidos sean los comentarios". Casi para reforzar el concepto le puso su nombre al último disco que incluye catorce canciones y cuyo tema "Dispara" fue compuesto por Kiko Cibrian, el productor de Cristian Castro y Luis Miguel, entre otros. Más allá de la reivindicación del talento como cantante que ella misma se encarga de realizar, la intérprete de "Dispara" se mostró muy liviana de ropas en el portfolio de "Sábado Bus", el programa de Nicolás Repetto. "Lo hice con gusto y me sentí bien. Con Nico nos conocemos desde hace años y nos apreciamos mutuamente. No me pareció nada mal", admitió.
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