El reducidor de autos Carlos Telleldín y el ex comisario bonaerense Juan José Ribelli elegirán el silencio para el primer tramo del juicio en su contra por el atentado a la Amia y se negarán a prestar declaración indagatoria ante el Tribunal Oral Federal 3. Ambos esperarán la incorporación de más pruebas al debate antes de dar su versión de los hechos ante los jueces Gerardo Larrambebere, Miguel Pons y Guillermo Gordo. "Ribelli esperará hasta que se incorpore toda la prueba que falta por la instrucción suplementaria que los jueces dispusieron, porque de lo contrario no sabe de qué se lo está acusando", aseguró su abogado Juan Manuel Ubeira. La misma posición seguirá Telleldín, según su abogado Víctor Stinfale. Para su defensa, el reducidor de autos fue víctima de una extorsión por parte de los policías bonaerenses y en ese marco entregó la camioneta. Por ende, más allá de haber sabido o no a qué estaba destinado el vehículo, si Telleldín fue víctima de este apriete no pudo nunca ser partícipe del atentado junto a sus extorsionadores. Esta postura adelanta una reafirmación de la confesión de Telleldín, quien dos años después de ser detenido reveló haber entregado la Trafic usada como cochebomba a Ribelli y sus hombres.
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