Mauricio Macri aseguró anoche que Boca Juniors no va a contratar al goleador de Lanús Diego Klimowicz para la final de la Copa Intercontinental ante el Bayern Munich y en cambio sentenció que prefiere que se le den más chances al japonés Takahara.
En cuanto a la sede de ese partido, Macri reveló que "podría no ser Japón, si es que no se iguala o mejora la oferta de dos partidos", uno en La Bombonera y el restante en Alemania.
A horas de regresar al país desde Estados Unidos, donde palpitó por televisión el superclásico frente a River, Macri dijo que recién pensó en que Boca podría revertir el 0-1 cuando el rival "se perdió tantos goles en el primer tiempo, aunque gracias a la extraordinaria tarea de Córdoba".
Respecto al arquero colombiano, Macri se consideró un afortunado pues "en el fútbol mundial son todos miopes y no aprecian que en Boca tenemos al mejor arquero del planeta".
"Es como un milagro y un lujo que siga con nosotros, dentro de un país de economía achicada. Fue un acierto haberlo contratado a él y no a (José Luis) Chilavert", sentenció.
En un breve análisis, Macri criticó las chances dilapidadas el domingo por su archirrival: "Los goles que no se hacen, se pagan en el otro arco. Sólo hicieron un gol en el primer tiempo y especularon mucho después, tirándose muy atrás y corriendo muchos riesgos. Acaso, les pasó lo mismo que a nosotros con Gimnasia".
"Si no nos hubiésemos desgastado tanto en la búsqueda del empate, hasta podríamos haber ganado", sostuvo.
Al ser consultado sobre las versiones sobre un supuesto interés de Boca por Klimowicz, Macri aseveró que "no hay nada de eso. Tengo un asesor, que es mi hijo, y me dice que hay que darle más oportunidades al japonés Takahara. A mí me parece que le tocó entrar en partidos que Boca no jugó bien, y él no desentonó".
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La Ciudad
