Buenos Aires.- Dos policías y ocho civiles serán juzgados entre noviembre y diciembre próximos en Rosario como sospechosos de integrar la banda que asaltó el banco Nación de Villa Ramallo el 17 de septiembre de 1999, en un caso que terminó en masacre, con dos rehenes y dos ladrones muertos y del que se cumplen el lunes dos años.
"Creemos que a fines de noviembre o principios de diciembre comenzará el debate oral por la causa que investiga el asalto al banco. La fecha de inicio tenía que definirse a mediados de este año pero se paró todo, no sabemos por qué", dijo Flora Lacave, la esposa del gerente asesinado aquel fatídico 17 de septiembre.
A dos años de la masacre de Villa Ramallo, ocurrida después de que tres ladrones se atrincheraron con rehenes en el banco durante más de 20 horas, la familia del gerente Carlos Chaves recordará a las víctimas con una ceremonia religiosa íntima que se realizará hoy a las 9.30 en la ciudad bonaerense de Lincoln.
"Va a ser algo simple, muy sencillo, entre mis hijas y yo porque somos a las que más nos duele la pérdida de Carlos. Este es el segundo año y siento que es peor que el primer aniversario porque se extraña muchísimo más", expresó Lacave, y precisó que la misa se llevará a cabo en la capilla del Hogar Virgen Niña de Lincoln.
Ante la ley
Las personas que serán sometidas a juicio a fines de este año están acusadas de integrar la banda que planificó y concretó el asalto al banco, pero ninguno de ellos será juzgado por la muerte de los rehenes.
Precisamente, por esos crímenes están detenidos tres policías, y su responsabilidad se debatirá en otro juicio que, según Lacave, podría iniciarse el año próximo.
La fecha de comienzo del juicio por el asalto debe ser fijada por la Sala A de la Cámara Federal de Rosario, que viene demorando ese trámite desde marzo de este año.
En esta causa, la número 1078 que instruye el juez federal de San Nicolás Carlos Villafuerte Ruzo, los acusados que serán juzgados son Carlos Martínez, el único sobreviviente de la banda que asaltó la entidad bancaria y Mónica Saldaña, hermana del ladrón Martín Saldaña que salió ileso del tiroteo pero que murió ahorcado en la comisaría de Villa Ramallo.
Integran la lista de imputados además Oscar Mendoza, concubino de Mónica Saldaña y sospechado de intentar efectuar una maniobra distractiva para despistar a los pesquisas y a la prensa; y Norberto Céspedes, dueño de la vivienda donde presuntamente se planificó el golpe entre policías y ladrones.
Jorge Aguilar, ex soldado voluntario acusado de proveer el trotyl que utilizó la banda; Alberto Aguirre, vinculado con la preparación del asalto; Silvia Vega, remisera acusada de llevar a los encargados de realizar la maniobra distractiva; Angélica Beatriz Vilches, acusada de asociación ilícita y de ser partícipe necesaria en el asalto, conforman también la nómina.
Y completan esa lista Aldo Cabral, un cabo del Comando Radioeléctrico de San Nicolás en cuya vivienda se halló el plano del banco y sospechado de proveer de un arma y un handy a la banda; y Alberto Castillo, un policía sindicado como quien retiró el handy del auto acribillado a balazos para esconder la vinculación policial.
Tres causas
Desde que empezó a investigar el caso, el juez federal Carlos Villafuerte Ruzo dividió la investigación en tres causas: la 1078/99 que investiga el asalto; la 1080/99, donde se detalla cómo se hizo el operativo policial y el fusilamiento de los rehenes y la 1263/00, por el ocultamiento y pérdida de pruebas.
En la causa 1080/99 están procesados y en libertad, por incumplimiento de las funciones de funcionario público los jefes de la Departamental y de la DDI de San Nicolás, comisarios inspectores, Adolfo Biardo y Omar Isaías, respectivamente.
Los peritajes a las armas y los proyectiles secuestrados determinaron que el sargento Ramón Leiva y el suboficial principal Oscar Parodi fueran imputados por homicidio simple, mientras que el cabo Carlos Aravena por homicidio en grado de tentativa. Estos tres policías están procesados por las muertes de los rehenes (Télam).
La Ciudad
