Gimnasia derrotó a Vélez y se acomodó arriba

Venció 3 a 2 y se ubicó transitoriamente como uno de los escoltas del líder Racing

Gimnasia y Esgrima atacó anoche con profundidad y, aunque defendió con ineficacia, logró vencer a Vélez Sarsfield por 3 a 2 y se transformó transitoriamente en uno de los escoltas de Racing, único líder del Apertura. Los goles de los triperos fueron anotados por Facundo Sava, Diego Herner y Claudio Enría, mientras que para el conjunto de Edgardo Bauza -todavía no pudo ganar desde que debutó- marcaron Federico Domínguez y el ex Newell's Fabricio Fuentes.
El primer tiempo fue entretenido porque ambos llegaron con frecuencia y goles, aunque favorecidos por groseros errores de sus defensores. Esteban Buján, Leandro Gracián, Federico Domínguez, Roberto Nanni y Darío Husaín complicaron con frecuencia a la defensa local. En tanto, los problemas del fondo velezano los generaba, especialmente, el arquero Leyenda, por su falta de capacidad para el juego aéreo y por los rebotes que otorgó.
Vélez empezó rendidor porque, a los 8 minutos, Federico Domínguez dominó la pelota bajo el arco con máxima facilidad y puso a Vélez en ventaja, luego de que un cabezazo de Nanni revotara en el travesaño tras una mala salida de Hernando.
A los 25' Gimnasia comenzó a recuperarse, cuando Sava ejecutó un penal abajo y a la derecha de Leyenda. La sanción se produjo por una falta de Sebastián Méndez contra el Colorado. Pero Vélez reaccionó de nuevo, a los 38, tras un terrible cabezazo de Fuentes.
El parcial finalizó igualado porque, a los 44, el zaguero Diego Herner prevaleció de cabeza, tras prevalecer entre adversarios y compañeros, luego de un centro de Messera.
El capítulo decisivo mantuvo la incertidumbre en el marcador porque se repetían los aciertos adelantes y las equivocaciones atrás, hasta que el giro de Enría marcó la tendencia definitiva.
Gimnasia viene con resultados que le permiten jugar con mayor tranquilidad, mientras mezcla a sus experimentados con sus jóvenes promesas.
Vélez todavía busca equilibrio, porque lo que prepara de mitad de cancha hacia adelante se malogra en el fondo.

Buján y Castillo buscan la pelota que se les escapa.