El entrenador de San Lorenzo, el chileno Manuel Pellegrini, anunció ayer que está esperando el retorno de Europa del presidente del club, Fernando Miele, con quien se sentará a conversar sobre sus condiciones de trabajo. A pesar de que descartó la posibilidad de dar un paso al costado por los inconvenientes económicos que está padeciendo la institución, Pellegrini destacó que la presente "no fue una semana normal. Estoy esperando que Miele llegue de Europa, porque no me gusta que se altere el natural trabajo de mi equipo". La referencia, inevitablemente, tuvo relación directa con el paro de actividades que decidieron asumir ayer los empleados del club, en virtud de no haber percibido sus respectivos salarios de julio, agosto y aguinaldo. La situación originó que los jugadores no dispongan en varios días de sus ropas de entrenamiento, razón por la cual hoy debieron concentrarse en un hotel de la zona de Balvanera, en lugar de hacerlo como sucede habitualmente en la ciudad deportiva. "Yo estoy tranquilo porque tengo la obligación de mantener la calma del grupo, pero espero que lleguen las soluciones" agregó Pellegrini, tras el entrenamiento matutino. (Télam)
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