La Asociación Argentina de Consorcios Regionales de Experimentación Agrícola (Aacrea) emitió un duro documento en el cual reclama el compromiso de los productores, operadores de la cadena cárnica y el gobierno para refundar la ganadería argentina, combatiendo la evasión fiscal y la competencia desleal.
La entidad señaló que la pérdida de credibilidad internacional por la reaparición de la aftosa "exige bastante más que vacunar" y reclamó "una visión más global del negocio y un proceso que asegure la transparencia y seriedad de toda la cadena comercial de la carne".
"Esto incluye un cambio de mentalidad de los productores con relación al comercio ilegal de hacienda, el ataque a la evasión fiscal y un plan de vacunación estricto y completo, para culminar con la trazabilidad del producto ofrecido", señaló y consideró que son los ganaderos los principales responsables de llevar adelante este proceso porque "aportan más del 90% del capital en juego en el negocio ganadero".
El primer paso de este desafío es "transparentar la situación fiscal en el comercio de hacienda y carnes". La entidad recordó que en los primeros meses posteriores a la reducción del IVA en la venta de hacienda disminuyó la competencia desleal "pero luego recuperó los niveles iniciales", de la mano de "la subfacturación, el tránsito de jaulas de hacienda sin guías y la faena en mataderos sin habilitación ni garantías de sanidad".
El documento de Aacrea es claro en este aspecto: "Para que subsista esta operatoria se requiere la conformidad de productores que aceptan transacciones ilegales". Por eso insistió en señalar que "quien evade impuestos perjudica a todos los ganaderos, no sólo al fisco" ya que "si hay una proporción de hacienda no declarada en términos impositivos no se puede asegurar la sanidad y seguridad alimentaria de la carne para exportar".
La asociación estimó que el segundo componente necesario del proceso para recuperar la credibilidad es "un plan de vacunación muy estricto y completo. En este sentido, observó con preocupación que "hayan transcurrido seis meses desde la primera vacunación contra la aftosa en el norte argentino y recién ahora se empiece a concretar la segunda".
La Argentina limita al norte con Bolivia, Paraguay y Brasil, países con aftosa. Como la enfermedad tuvo su primera manifestación en el norte, inicialmente se realizó una vacunación masiva de los rodeos de esas provincias, lo que disminuyó la cantidad de focos y permitió neutralizar el problema. "Este menor riesgo sanitario determinó que se dejara de prestar atención especial a la región y que se pusiera el acento en la vacunación en la zona pampeana", señaló la entidad en el documento.
Para Aacrea, la rápida protección contra la aftosa con dos vacunaciones en la hacienda del norte es estratégica, al ser una zona que provee terneros a todo el país. Los datos del Senasa, recogidos en el documento, muestran que Formosa envía al sur 180 mil animales por año, en su mayoría destinados a invernada, Chaco 334 mil, Corrientes 851 mil y Entre Ríos 667 mil.
para evitar inconvenientes adicionales en el control de la enfermedad".
"Además, en la región norte, con frontera seca y monte, el contrabando de hacienda a precios bajísimos es punto de partida para otros ilícitos que incluyen el logro de la documentación, transporte y sorteo de varios controles hasta llegar a destino en la zona de invernada. El contralor de estas anomalías debería ser una prioridad del gobierno federal", indicó la asociación.
En un plano más general, Aacrea pidió que se vuelva a reunir la Comisión Nacional de Aftosa. "Se trata de refundar la ganadería argentina a partir de una situación desfavorable, y este objetivo no descansa sólo en acciones sanitarias sino en un nuevo ordenamiento en todas las etapas de la actividad".
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La Ciudad
