Gimnasia y Estudiantes, un clásico con mucho respeto

Empataron 1 a 1. Los goles los convirtieron Sava y Sanguinetti, en contra

Gimnasia y Estudiantes arrancaron con un primer cuarto de hora de excepción, en el que llegaron los goles, pero curiosamente después se respetaron demasiado y terminaron igualando 1 a 1 dentro de una conformidad cómplice, en otra versión del clásico platense que dejó tranquila a la ciudad de las diagonales.
Facundo Sava, a los 5 minutos, puso en ventaja a los triperos, mientras que a los 12 el uruguayo Guillermo Sanguinetti, en contra, señaló el empate pincharrata.
El balance final dejó para el equipo de Carlos Griguol un pequeño saldo favorable en la posesión de la pelota, pero Estudiantes teniéndola mucho menos le creó igual cantidad de situaciones, por lo cual el empate terminó siendo un resultado justo.
Los primeros minutos se jugaron con mucho vértigo, los dos apelaron a una fuerte presión en el sector medio, y curiosamente ambos encontraron la salida por el lado derecho de sus ataques.
Los locales tuvieron en el veterano Pedro Troglio al carrilero perfecto por esa zona, mientras que los pinchas se apoyaron en el buen manejo de Fabio Pieters para encontrarle la vuelta al partido.
A los cinco minutos llegó la apertura del marcador, cuando Troglio inició la jugada que terminó en una espectacular palomita del Colorado Sava.
De ahí en más apareció la figura de Pompei en Estudiantes para acercarse al arco de Hernando. Y con la misma receta, la de los centros, a los nueve minutos Colottó capitalizó un envío del ex Boca para meter un misil que fue devuelto por el palo derecho.
Tres minutos más tarde, otro centro de Pompei se desvió en Sanguinetti y decretó el empate de Estudiantes.
Después, llegó la lluvia y el partido fue más lento, arriesgaron mucho menos y ambos apostaron al error del rival.
Tras el descanso, Estudiantes logró una mayor solidez defensiva a partir de los ingresos de Azconzábal y Cardozo, pero siguió padeciendo de potencia arriba. Algo similar le ocurrió a Gimnasia que intentó algo más, pero sin claridad a la hora de pisar el área rival.
En realidad, los dos atacaron con muy pocos jugadores, eso le quitó dinamismo al juego y quedó la sensación de que el gol sólo llegaría por un error. El rubio Enría en dos ocasiones, Sava en otra y Messera tuvieron las opciones más claras para vencer a Tauber, en tanto Farías, Maggiolo y Cardozo estuvieron a punto de cambiar la historia de un clásico que terminó dejando a todos sus protagonistas muy conformes.