El gobierno de Brasil se convertirá en el primer país del mundo en violar la patente de un remedio contra el sida para reducir su precio, considerado "abusivo", según informó el ministro de Salud, José Serra. "Es una situación de emergencia y no vamos a dejar de dar ese remedio a los pacientes porque una empresa no quiere bajar el precio", señaló Serra al dar por terminadas las negociaciones con el laboratorio suizo Roche, productora de Nelfinavir.
Pero, en Ginebra, Franz Humer -de Roche- negó que las negociaciones con el gobierno brasileño estén rotas y aseguró que, por el contrario, "están bien encaminadas y sólo estamos esperando para agendar un nuevo encuentro con las autoridades, conforme había sido acordado. En el marco de esas negociaciones con el Ministerio de Salud, ya habíamos concedido descuentos muy próximos a lo que ellos querían. Estamos sorprendidos por la noticia", agregó el portavoz.
De acuerdo con el ministro Serra, el laboratorio local Farmaguinhos, de Río de Janeiro, está en condiciones de producir copias del Nelfinavir a partir de febrero del próximo año. El gobierno brasileño espera que el precio de este remedio caiga en un 50 por ciento.
Este medicamento integra el coctel de remedios contra el sida que el gobierno distribuye gratuitamente a 95 mil enfermos, con un costo anual de 303 millones de dólares.
El programa de lucha contra el sida es el más exitoso del Ministerio de Salud y permitió bajar en un 40 por ciento el número de muertes por esta causa en los últimos 4 años.
De acuerdo a los datos oficiales, 536.920 personas de entre 15 y 49 años están infectadas en este país con el virus del Síndrome de Inmuno Deficiencia Adquirida. Brasil es el país de América Latina con el mayor número de infectados por este virus.
Conflicto con EEUU
La decisión de Brasil puede abrir un nuevo foco de conflicto con Estados Unidos en el campo de la lucha contra el sida ya que la patente del medicamento es norteamericana, como se ocupó de recordar la filial brasileña del laboratorio suizo Roche en una nota oficial en la que expresó su disgusto.
A principios de año, las amenazas del gobierno brasileño de violar las patentes de remedios contra el sida si los laboratorios no bajaban los precios llevó a Estados Unidos a presentar una queja ante la Organización Mundial del Comercio (OMC).
Pero, la presión internacional y el éxito del programa del gobierno brasileño contra el sida hicieron que Estados Unidos desistieran en junio de su queja ante la OMC.
El ministro Serra señaló que "el gobierno gasta 88 millones de dólares al año sólo en la compra de Nelfinavir. Nosotros le pedimos que bajaran los precios, como ya hicieron otros laboratorios, pero la gente de Roche ofreció un descuento de sólo el 13 por ciento".
A causa de la presión del gobierno, el laboratorio Merck Sharp & Dohme bajó los precios de sus productos en entre el 60 y el 64,8 por ciento. La filial local del laboratorio Roche reaccionó manifestando su "sorpresa por la noticia porque las negociaciones entre la empresa y el Ministerio de Salud han sido amistosas. La empresa ya concedió descuentos próximos a los solicitados por el ministerio y también donó medicamentos para el tratamiento de niños con sida", señaló.
Por su lado, el ministro Serra explicó que su decisión se basa en el artículo 71 de la ley brasileña de patentes, que permite la violación de los derechos de propiedad intelectual en casos de emergencia nacional o interés público. "Tenemos que tener herramientas para contrarrestar los abusos y la acción de los monopolios", argumentó el ministro.
Según los datos de su ministerio, en los últimos años el sida en este país cambió su cara y pasó a ser una enfermedad de heterosexuales pobres, jóvenes y con bajo nivel de instrucción, con un fuerte crecimiento entre las mujeres. Los datos oficiales indican que más de 150 mil personas ya han muerto de sida en Brasil.
La Ciudad
