Los mercados continuaron ayer dándole la espalda a la debilitada economía argentina con una fuerte baja de las acciones líderes. Los inversores, alejados de los bonos argentinos de la deuda, provocaron una brusca suba del riesgo país, que se disparó por encima de los 1.600 puntos básicos (1.664), en tanto que los papeles líderes de la Bolsa de Comercio de Buenos Aires cerraron con una baja del 3,46%, después del desplome del viernes que fue superior al 6%.
En tanto, los bonos retrocedieron en promedio el 7,89% según el indicador MBA, y el 5,58%, según el MAE.
La falta de noticias sobre la ayuda que la Argentina podría recibir del Fondo Monetario Internacional (FMI), entre 6.000 y 9.000 millones de dólares según informaciones extraoficiales, influyó negativamente en el mercado doméstico y en el exterior.
La junta de directores del FMI no llegó a un acuerdo sobre la forma de ayudar a la Argentina -aunque anoche se realizó una reunión de último momento- mientras el viceministro de Economía, Daniel Marx, el funcionario del equipo económico que encabeza las negociaciones, permanece en Washington desde hace 12 días.
En tanto, el ministro de Economía, Domingo Cavallo, informó al gabinete que las negociaciones finalmente serán positivas, pero no anticipó una fecha para el eventual acuerdo que algunas versiones dicen podría anunciarse mañana, aunque desde hace días se rumorea con un final de las negociaciones que hasta ahora no llega.
"Como el lunes no hubo operaciones en Argentina, la Bolsa se ajustó a los valores de ayer del mercado de Estados Unidos. Se suma el aumento del riesgo país, que muestra un incremento en las dudas sobre la solvencia y capacidad de pago del país", dijo el analista de la consultora privada Argentine Research.
El mercado "ve que el acuerdo (con el FMI) no va a ser como se había pensado. El monto no será tan importante", añadió.
La ayuda extraordinaria estará destinada especialmente a fortalecer el sistema financiero ante una fuga de depósitos que llegó a superar los 8.000 millones de dólares.
Sube la desconfianza
En los últimos días se sumó una nueva preocupación para los mercados, producto de la profundización de la pérdida de depósitos: la desconfianza en el sistema bancario.
"Cada vez hay una situación más comprometida y las posibilidades de revertirla son limitadas", dijo Ber.
El riesgo país terminó en 1.664 puntos básicos, más de 100 sobre el cierre del lunes, como consecuencia de la baja que sufrieron los papeles de la deuda externa.
El recorte de la tasa de interés decidida por la Reserva Federal de Estados Unidos no alcanzó incluso para aplacar a los inquietos mercados sobre la situación argentina.
Los inversores están nerviosos e impacientes a la espera de definiciones del FMI, dijeron operadores.
Las condiciones que impondría el FMI a la Argentina serían mucho más duras de las esperadas y se anticipa que habrá resistencia de las provincias para someterse a otro ajuste de gastos.
Los temores de los inversores están relacionados con una eventual cesación de pagos (default) de la deuda de 128.000 millones de dólares, lo que ha sido negado numerosas veces por el gobierno argentino que también garantizó el régimen de convertibilidad que ata el dólar con el peso.
En agosto las reservas internacionales del Banco Central disminuyeron 2,11% a 20.540 millones de dólares.