Capitán Bermúdez. - Se denominan prosumidores, término que define a quienes son productores y consumidores al mismo tiempo. Intercambian bienes y servicios, productos y sapiencia, ofrecen lo mejor que cada uno tiene, puede ser una torta, una visita al médico, un mueble de hierro, cortes de cabello, clases de inglés o de yoga, verduras o ropa. Anteayer reunieron a más de 2.500 personas en una megaferia para celebrar el primer año de funcionamiento del Nodo Capitán Bermúdez de la Red de Trueque Solidario de la zona de Rosario y el sur de la provincia.
El encuentro, que se realizó en el Club Villa del Prado, tenía horario de inicio para las 10, pero desde las siete ya había gente haciendo cola para ingresar a las instalaciones de la megaferia.
El nodo bermudense está coordinado por el Centro Ecuménico Poriajhú (pobre, en guaraní) funciona como una asociación civil sin fines de lucro, para ayudar a la educación popular y a la promoción social. El centro ha encontrado en el trueque una herramienta para el desarrollo de emprendimientos productivos, dirigidos a jóvenes excluidos del sistema educativo y a familias con problemas de desocupación.
La red constituye una economía alternativa, que permite tener alta la autoestima y vivir dignamente. "Si los participantes trabajan y se mantienen dentro del trueque pueden subsistir, la mayoría nos dice que llega a fin de mes y que come gracias a él", afirmó el prosumidor Edgardo Farinetti. "Muchos perdieron sus empleos, pero no la capacidad de trabajar", acotó.
"No sólo hay gente pobre, el trueque es para todo aquel que teniendo un trabajo quiere vivir de una forma distinta e intercambiar con el otro. Hay chicos desde los 13 años, jubilados, amas de casa, desocupados, obreros, es un punto de integración, no hay discriminación", afirmó María Milagro, coordinadora del Centro Poriajhú.
Las entidades que conforman la red no tienen identificación política o religiosa ni persiguen ningún fin lucrativo. Ofrecen sus servicios a unos 15.000 prosumidores en la zona y semanalmente se hacen 120 ferias.
A la megaferia asistieron prosumidores comprendidos en la zona desde Barrancas hasta Villa Constitución. Además llegó un contingente en 3 micros de Buenos Aires.
Grupo de autoayuda
Los clubes de trueque funcionan como un grupo de autoayuda donde cada integrante ofrece sus conocimientos en forma de bienes y servicios y los troca por otros. Las relaciones no están fundadas en el mercantilismo, sino en pautas de compromiso basadas en la ética y la solidaridad.
El trueque lleva más de seis años en el país; en Rosario el primero se creó en septiembre de 1999, su gestora fue Gladys Martínez al poner en marcha el Nodo Rosario I, que todos los sábados funciona en San Martín y el río Paraná en la Pérgola del parque de España.
La Red del Trueque Solidario posee ramificaciones en Chile, Uruguay, Brasil y Colombia. Experiencias similares se realizan con éxito en Canadá, Estados Unidos, Francia, España y Japón.
Los integrantes de la red se manejan con créditos (moneda social interna y herramienta para facilitar los intercambios) que son válidos en cerca de 1.000 nodos de casi toda la Argentina. "El respaldo del crédito es trabajo. El que más trabaja más crédito tiene", dijo Milagro."La red de Bermúdez creció de 13 miembros, hace un año, a 900 personas que hoy concurren a las ferias de los martes y viernes. Tenemos variedad de rubros y servicios, las personas se han integrado con sus oficios, hay albañiles, carpinteros, electricistas, colocadores de cerámicos", contó Milagro.
"Para muchos el trueque es una opción alternativa, pero para otros es su forma de subsistencia, incluso algunos elevaron su calidad de vida. Nosotros hemos visitado familias que tenían hijos que no iban a la escuela, nos decían que sus chicos hacía tres días que no comían, que no tenían zapatillas, entonces lo de la escuela pasa a segundo plano. Encontramos con el trueque una forma de integrar a toda la familia y hallar respuestas a esos problemas", explicó María.
Las actividades del trueque son permanentes. Las ferias se multiplican día a día. Además hay reuniones especiales, como por ejemplo la del 28 de este mes, que es el Día de la Solidaridad, cuando en el parque Urquiza el Nodo Rosario I participará de una feria de trueque "donde se mostrará cómo cuando la gente quiere agruparse y trabajar solidariamente se puede hacer", afirmó Gladys Martínez.
El Centro Ecuménico Poriajhú es una organización no gubernamental que funciona con los trueques los lunes y jueves desde las 9 en el Club de la Tercera Edad y los lunes desde las 16 en la vecinal Villa Margarita, de Laprida 268 de Capitán Bermúdez. Carlos Toki Giampani, miembro del Centro Poriajhú, enfatizó: "El trueque es una propuesta que protesta contra la miseria, un piquete de intercambio solidario, un corte de la ruta de la injusticia".
La Ciudad
